Un análisis de las tendencias actuales en las relaciones sexoafectivas y su impacto social
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La evolución de las relaciones sexoafectivas
En la actualidad, las relaciones sexoafectivas han tomado un giro inesperado, convirtiéndose en un auténtico rompecabezas para muchos. La sexualidad, un campo vasto y diverso, se enfrenta a nuevas realidades donde el celibato voluntario y la apertura de las relaciones están ganando terreno.
Cada vez más, jóvenes mujeres, cansadas del machismo y de las relaciones superficiales que predominan en la era de las aplicaciones de citas, optan por renunciar al sexo. Eira Scheper, una de estas mujeres, afirma: “He quitado a los hombres del foco, ya no son mi centro de atención”.
Esta decisión refleja un cambio significativo en la forma en que se perciben las relaciones en la sociedad contemporánea.
La apertura en las relaciones: más que poliamor
Por otro lado, existe un grupo que no se conforma con la monogamia tradicional, aunque mantenga un vínculo estrecho con su pareja. La apertura de las relaciones no se limita al poliamor; a menudo, se trata de una búsqueda de nuevas experiencias. La sexóloga Sandra Bravo aclara que “abrir una relación no significa que la vida se vaya a convertir en una gran orgía”. Esta perspectiva desafía la noción de que la apertura necesariamente conlleva complicaciones o dramas emocionales. De hecho, muchos buscan simplemente añadir un aire fresco a su relación, explorando la posibilidad de mantener relaciones con otras personas sin que esto implique un vínculo sentimental.
Según un estudio del CIS de 2023, el 47,6% de los españoles encuestados considera que es posible mantener “dos o más relaciones afectivo-sexuales a la vez”. Este dato revela un cambio en la percepción social sobre la sexualidad y las relaciones. En particular, entre los españoles de 55 a 64 años, más del 45% acepta la idea de que las parejas pueden acordar tener relaciones externas sin que esto afecte su vínculo principal. Esta aceptación sugiere que las normas tradicionales están siendo cuestionadas y que las personas buscan formas más flexibles de relacionarse.
El impacto del celibato y la apertura en la sociedad
El celibato voluntario y la apertura en las relaciones no solo son decisiones personales, sino que también reflejan un cambio cultural más amplio. A medida que las personas se sienten más empoderadas para definir sus propias experiencias sexuales y afectivas, se desafían las normas establecidas. Este fenómeno puede ser visto como una respuesta a la insatisfacción con las dinámicas de poder tradicionales en las relaciones. La socióloga Elisa García Mingo, experta en manosfera y misoginia digital, destaca que estas nuevas dinámicas pueden ofrecer una alternativa a las relaciones convencionales, permitiendo a las personas explorar su sexualidad de manera más auténtica y libre.
