El Juzgado de Instrucción de Granada suspende la orden de regreso a Italia del menor.
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Contexto del caso de Juana Rivas
El caso de Juana Rivas ha captado la atención mediática en España debido a las complejas circunstancias que rodean la custodia de su hijo menor. Rivas, quien ha denunciado a su expareja, Francesco Arcuri, por violencia machista, se encuentra en una batalla legal que ha llevado a la intervención de las autoridades judiciales.
La reciente decisión del Juzgado de Instrucción número 4 de Granada de suspender la orden de restitución del menor a Italia es un desarrollo significativo en este caso.
Decisión del Juzgado de Instrucción
El Juzgado de Instrucción de Granada ha acordado la suspensión provisional de la orden emitida por la justicia italiana que requería el regreso del hijo de Juana Rivas a Italia con su padre.
Esta decisión se tomó en respuesta a la solicitud de la Fiscalía de Granada y la representación legal de Rivas, con el objetivo de proteger al menor. La juez de guardia, tras escuchar al niño de diez años, consideró que era necesario evaluar más a fondo la situación familiar antes de tomar una decisión definitiva.
La situación del menor y las denuncias de violencia
El menor llegó a España el 22 de diciembre con un permiso especial para visitar a su madre y su hermano. Durante su estancia, ha surgido una serie de denuncias por parte de Juana Rivas, quien ha vuelto a acusar a Arcuri de malos tratos. Según el equipo jurídico de Rivas, el menor ha expresado su temor de regresar a Italia, donde supuestamente ha sido víctima de episodios de violencia. Esta situación ha llevado a la juez a inhibirse en favor del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 2 de Granada, que ahora deberá decidir sobre el futuro del procedimiento.
El caso de Juana Rivas no solo plantea cuestiones legales complejas, sino que también refleja un problema social más amplio relacionado con la violencia de género y la protección de los menores. La historia de Rivas, quien fue condenada anteriormente por sustracción de menores, ha suscitado un debate sobre cómo el sistema judicial maneja los casos de violencia familiar y la custodia de los hijos. La decisión de suspender la orden de restitución es un paso que podría tener repercusiones significativas en la vida del menor y en la relación entre los padres.
