El ex primer ministro griego falleció a los 88 años, dejando un legado político significativo.
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Este domingo, el panorama político griego se tiñó de luto con el fallecimiento de Costas Simitis, quien fue primer ministro de Grecia entre 19. A los 88 años, Simitis dejó este mundo en su casa de campo en Agioi Theodoroi, en la región de Corinto.
Su muerte fue confirmada tras ser ingresado en el Hospital de Corinto, donde se intentaron infructuosamente maniobras de reanimación.
El legado de Simitis es indiscutible en la historia reciente de Grecia. Como uno de los fundadores del Partido Socialista Panhelénico (PASOK), creado en 1974 tras la dictadura militar, su influencia se extendió más allá de su tiempo en el poder.
Durante su mandato, implementó reformas económicas significativas que ayudaron a modernizar el país y a alinearlo con las políticas de la Unión Europea.
Un líder visionario y moderado
El actual primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, destacó la figura de Simitis como un «valioso y noble rival político». En sus declaraciones, enfatizó su papel como un moderado en la política griega, así como su dedicación a la modernización del país. Mitsotakis lo describió como un «competente profesor universitario» y un «catalizador de la vida pública».
Por su parte, Nikos Androulakis, líder del PASOK-Movimiento por el Cambio, también rindió homenaje a Simitis, resaltando su «gran legado político» y su visión europeísta. La muerte de Simitis marca el fin de una era en la política griega, donde su influencia y decisiones han dejado una huella profunda.
Un legado de reformas y modernización
Nacido el 22 de junio de 1936, Simitis estudió Derecho y Economía en Alemania y el Reino Unido. Antes de convertirse en primer ministro, ocupó diversas carteras ministeriales, lo que le permitió acumular una vasta experiencia política. Su ascenso al poder en 1996, tras relevar a Andreas Papandreou, fue un punto de inflexión en la política griega.
Durante su mandato, Simitis impulsó reformas clave que llevaron a la privatización de diversas industrias y a la estabilidad fiscal del país. Su gobierno también fue responsable de la entrada de Grecia en la moneda única europea, el euro, un paso crucial para la economía griega. Además, moderó la política exterior del país, buscando un equilibrio en las relaciones internacionales.
El adiós a un líder histórico
El funeral de Costas Simitis se llevará a cabo el próximo jueves, 9 de enero, en la Catedral Metropolitana de Atenas. Su partida deja un vacío en la política griega, pero su legado perdurará en la memoria colectiva del país. La historia recordará a Simitis no solo como un político, sino como un hombre que se esforzó por modernizar y transformar Grecia en un estado más europeo y competitivo.
