La DGT implementará nuevas normas para mejorar la seguridad vial en condiciones adversas.
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Nuevas regulaciones de la DGT para la conducción en invierno
La Dirección General de Tráfico (DGT) de España ha anunciado importantes cambios en el Reglamento General de Circulación (RGC) que entrarán en vigor en 2025. Estas modificaciones están diseñadas para mejorar la seguridad en las carreteras durante condiciones meteorológicas adversas, como la nieve y el hielo.
Uno de los aspectos más destacados de esta reforma es la restricción de circulación en autovías, que afectará a la manera en que los conductores deben comportarse en situaciones de mal tiempo.
Restricciones en la circulación por autovías
Según la nueva normativa, los vehículos solo podrán circular por el carril derecho de las autovías en caso de que haya nieve o hielo. Esta medida tiene como objetivo principal facilitar el trabajo de las máquinas quitanieves, que podrán utilizar el carril izquierdo sin obstáculos. La DGT espera que esta regulación ayude a mantener las vías despejadas y a garantizar una circulación más fluida durante las inclemencias del tiempo.
Impacto en la Comunidad de Madrid y otras regiones
Las nuevas regulaciones afectarán a numerosas autovías en la Comunidad de Madrid, incluyendo las principales vías de acceso y circunvalación como la M-11, M-30 y M-40. Además, se verán impactadas las autovías radiales más transitadas, como la A-1 y A-2. En caso de embotellamientos, la normativa también establece la creación de un corredor central de emergencia, lo que permitirá el paso rápido de vehículos de emergencia como ambulancias y bomberos.
Uso del arcén por motoristas
Otra de las novedades importantes es la nueva disposición sobre el uso del arcén. A partir de 2025, los motoristas podrán circular por el arcén derecho en situaciones de retención o atasco, siempre que respeten un límite de velocidad de 30 km/h y cedan la prioridad a otros vehículos que ya tienen derecho a circular por esa área, como las bicicletas. Esta medida busca mejorar la fluidez del tráfico y garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía.
Con estas reformas, la DGT busca no solo adaptarse a las condiciones climáticas cambiantes, sino también fomentar una cultura de conducción más responsable y segura en las carreteras españolas. La implementación de estas medidas será crucial para reducir accidentes y mejorar la movilidad en situaciones adversas.
