Decenas de miles de serbios se manifiestan en Belgrado pidiendo responsabilidades al gobierno.
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Contexto de las protestas en Serbia
Este domingo, Belgrado se convirtió en el epicentro de una de las manifestaciones más significativas de los últimos años, donde decenas de miles de personas se unieron para protestar contra la corrupción y el autoritarismo del presidente Aleksandar Vucic.
La movilización surge tras el trágico colapso de una estación de tren en Novi Sad, que resultó en la muerte de 15 personas el pasado 1 de noviembre. Este evento ha encendido la indignación popular, llevando a los ciudadanos a exigir no solo justicia, sino también un cambio en la forma en que se gobierna el país.
Demandas de los manifestantes
Los manifestantes, que se reunieron en la plaza Slavija, expresaron su descontento mediante lemas contundentes y pancartas que reflejaban su frustración. Frases como “Vuestras manos están manchadas de sangre” y “Cárcel, no dimisiones” resonaron en el aire, evidenciando la exigencia de rendición de cuentas por parte del gobierno. Visnja, una estudiante de 20 años, destacó que las demandas de los ciudadanos han sido ignoradas, y que la información sobre la reconstrucción de la estación es incompleta. “Queremos que el Gobierno deje de mentir y que termine la corrupción”, afirmó, subrayando la necesidad de un cambio real.
La respuesta del gobierno y la continuidad de las protestas
A pesar de las afirmaciones del gobierno de que ha cumplido con las demandas de los manifestantes, la realidad es que las protestas continúan. Los estudiantes han bloqueado más de 50 facultades en varias ciudades, exigiendo justicia y responsabilidad por el accidente en Novi Sad. Ognjen Radonjic, profesor de la Facultad de Filosofía, argumenta que la caída de la marquesina es solo un síntoma de un sistema más amplio que se basa en la violencia. La falta de respuestas claras y la sensación de impunidad han alimentado el descontento, lo que sugiere que las manifestaciones podrían persistir hasta que se logren cambios significativos en la gobernanza del país.