Un seísmo de magnitud 7,3 causa estragos en la población de Vanuatu
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Un terremoto devastador sacude Vanuatu
El archipiélago de Vanuatu fue golpeado por un terremoto de magnitud 7,3 este miércoles, dejando a su paso una estela de destrucción y tragedia. Las primeras informaciones indican que al menos catorce personas han perdido la vida, mientras que alrededor de 200 han resultado heridas.
La situación es crítica, con un número indeterminado de desaparecidos que aumenta la angustia entre los familiares y amigos de las víctimas.
Imágenes impactantes del desastre
Las redes sociales se han inundado de imágenes que capturan el horror vivido por los habitantes de Vanuatu durante el seísmo.
En varios videos, se observa cómo las personas, aterrorizadas, huyen de cafeterías y edificios en medio de un caos total. Los muebles se desplazan violentamente y la población se aferra a lo que puede mientras el suelo tiembla bajo sus pies. La capital, Port Vila, ha sido una de las zonas más afectadas, donde los daños son evidentes y las necesidades de ayuda son urgentes.
Esfuerzos de rescate y ayuda humanitaria
Tras el desastre, los equipos de emergencia han intensificado sus esfuerzos para recuperar a las personas atrapadas en los escombros. Sin embargo, las operaciones de rescate se ven complicadas por carreteras bloqueadas y condiciones climáticas adversas. Según informes de las Naciones Unidas, cerca de 1.000 personas han sido desplazadas y se estima que unas 20.000 carecen de acceso a agua potable. Brecht Mommen, especialista de Unicef, ha advertido sobre el riesgo de un brote de enfermedades debido al consumo de agua contaminada, lo que añade una nueva capa de urgencia a la situación.
Desafíos en la recuperación
La recuperación en Vanuatu enfrenta múltiples desafíos. Las lluvias pronosticadas para los próximos días podrían agravar la situación, provocando deslizamientos de tierra que ya han bloqueado el puerto marítimo. El aeropuerto, que actualmente solo opera vuelos humanitarios, reanudará los vuelos comerciales el domingo, lo que podría facilitar la llegada de más ayuda. Sin embargo, la población sigue en estado de alerta, esperando que las autoridades logren restablecer la normalidad en medio de esta crisis humanitaria.
