El capitán del Sevilla FC recibe un homenaje inolvidable en su último partido en casa.
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Un adiós lleno de emociones
Jesús Navas, el emblemático capitán del Sevilla FC, está viviendo sus últimas semanas como futbolista profesional. Este sábado, el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán se convirtió en el escenario de una despedida inolvidable, donde la afición sevillista rindió homenaje a uno de sus máximos ídolos.
Desde el calentamiento, los seguidores mostraron su apoyo incondicional, vitoreando al jugador palaciego que ha dejado una huella imborrable en la historia del club.
Un homenaje sin precedentes
El ambiente en el estadio era electrizante. Un espectacular tifo que decía «Orgullo de Nervión» fue desplegado por la afición, reflejando el cariño y la admiración que sienten por Navas.
Al son del himno del Sevilla, el capitán saltó al campo acompañado de sus compañeros, quienes llevaban camisetas en su honor. Este gesto simboliza la unidad y el respeto que todos tienen hacia él, un líder tanto dentro como fuera del campo.
Momentos que quedarán en la memoria
La emoción se palpaba en el aire cuando Navas, visiblemente conmovido, salió al campo con sus hijos. Las lágrimas no solo fueron suyas, sino que se compartieron con todos los presentes, quienes coreaban su nombre en un acto de reconocimiento a su trayectoria. En un gesto de camaradería, los jugadores del Celta también se unieron al homenaje, vistiendo camisetas rojas en honor al capitán sevillista, mostrando que el respeto trasciende la rivalidad deportiva.
Un legado que perdura
El acto culminó con un saque de honor que Navas realizó junto a sus hijos, un momento simbólico que representa el cierre de un capítulo en su vida. A medida que el partido comenzaba, el estadio resonaba con los aplausos y vítores de una afición que nunca olvidará lo que este jugador ha significado para el Sevilla FC. Su legado perdurará en la memoria de todos los que han tenido la fortuna de verlo jugar, y su nombre quedará grabado en la historia del club.