Miles de georgianos exigen la reanudación de negociaciones para unirse a la UE.
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Protestas en Georgia: la lucha por la integración europea se intensifica
En los últimos días, Georgia ha sido escenario de intensas manifestaciones que han reunido a miles de ciudadanos en la emblemática avenida Rustaveli, frente al Parlamento. Estas protestas, que se han prolongado durante siete días consecutivos, tienen como objetivo principal exigir la reanudación de las negociaciones para la adhesión del país a la Unión Europea.
La situación se ha agravado tras la detención de Nika Gvaramia, un destacado líder opositor, quien fue arrestado de manera violenta por la policía durante un registro en la sede de su partido en Tiflis.
Detención de Nika Gvaramia y su impacto en las protestas
Nika Gvaramia, un abogado de 48 años y director de medios de comunicación, fue arrestado mientras se encontraba en la sede de su partido, Coalición para el Cambio. Según informes, fue derribado al suelo y quedó inconsciente antes de ser llevado a un vehículo de detención. Un video divulgado por su partido muestra cómo varios hombres lo arrastran por las escaleras, lo que ha generado una ola de indignación entre los manifestantes y la comunidad internacional. La situación ha llevado a un aumento en la participación de ciudadanos en las protestas, quienes exigen justicia y el fin de la represión gubernamental.
Reacciones de la oposición y la comunidad internacional
La presidenta del Movimiento Nacional Unido, Tinatin Bokuchava, ha denunciado que las acciones del gobierno son parte de una “operación especial al estilo ruso” contra el pueblo georgiano. Los líderes de la oposición se han reunido de manera urgente para discutir un plan de acción tras los recientes registros policiales, que consideran una escalada en la represión. Además, han señalado que el gobierno de Sueño Georgiano, considerado prorruso, está utilizando tácticas represivas para silenciar a la oposición y mantener el control.
La respuesta del gobierno y el clima de tensión
El director del departamento de Investigaciones Criminales de la policía georgiana, Teymuraz Kupatadze, ha informado que durante los registros se encontraron cócteles Molotov y otros artefactos que vinculan a los opositores con actos violentos. Hasta el momento, se han detenido a 13 personas por su participación en manifestaciones consideradas ilegales. Mientras tanto, los manifestantes continúan bloqueando la avenida frente al Parlamento, exigiendo la dimisión del gobierno y la celebración de nuevas elecciones. La tensión en las calles es palpable, con enfrentamientos ocasionales entre los manifestantes más radicales y las fuerzas del orden.
Las protestas en Georgia no solo reflejan un descontento interno, sino que también ponen de manifiesto la lucha del país por su futuro en el contexto europeo. A medida que la situación se desarrolla, la comunidad internacional observa con atención, preocupada por el impacto que estos eventos puedan tener en la estabilidad de la región y en el camino de Georgia hacia la integración europea.