La I Conferencia Internacional de Personas Desaparecidas resalta la lucha de las familias por sus seres queridos.
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La lucha de las familias por la verdad
La desaparición de seres queridos es una de las experiencias más dolorosas que pueden enfrentar las familias. En este contexto, la I Conferencia Internacional de Personas Desaparecidas celebrada en Sevilla se convierte en un espacio de encuentro y reivindicación.
Durante este evento, José Antonio Casanueva, abuelo de Marta del Castillo, quien fue asesinada en 2009, reafirmó su compromiso de buscar el cuerpo de su nieta mientras tenga vida. Este testimonio conmovedor refleja la realidad de muchas familias que, a pesar del tiempo transcurrido, no cesan en su búsqueda de justicia y verdad.
Reconocimiento y solidaridad en la conferencia
La conferencia, organizada por la Fundación Europea por las Personas Desaparecidas (QSDglobal), reunió a familiares de víctimas de desapariciones, activistas y representantes de instituciones. Durante la apertura, se rindió homenaje a las víctimas y se destacó la importancia de la solidaridad entre quienes comparten este dolor. Casanueva, con 88 años, agradeció el reconocimiento y expresó su apoyo a otros familiares, enfatizando que «la pérdida de un ser querido» es una experiencia universal que une a las personas en su sufrimiento.
El papel de las instituciones en la búsqueda de desaparecidos
El evento también sirvió para reconocer el trabajo de los cuerpos de seguridad del Estado y las autoridades en la búsqueda de desaparecidos. Casanueva destacó la importancia de su labor y la necesidad de seguir luchando por la verdad. La conferencia se convierte en un llamado a la acción, no solo para las familias, sino también para las instituciones, que deben garantizar que se realicen todas las investigaciones necesarias para esclarecer los casos de desapariciones. La colaboración entre las familias y las autoridades es fundamental para avanzar en la búsqueda de justicia.
Un mensaje de esperanza y perseverancia
A pesar del dolor y la incertidumbre, la conferencia dejó un mensaje de esperanza. Casanueva animó a los presentes a continuar luchando por sus seres queridos, recordando que la búsqueda de la verdad es un camino que vale la pena recorrer. La presencia de personas de diferentes países, que han vivido experiencias similares, subraya la necesidad de crear redes de apoyo y solidaridad a nivel internacional. La lucha por la justicia no tiene fronteras y cada historia compartida fortalece el compromiso colectivo.
