Las avenidas de Madrid han sido invadidas nuevamente por miles de ciudadanos que exigen un adelanto electoral debido a los escándalos de corrupción que afectan al Ejecutivo de Pedro Sánchez. Los participantes, entre los que se encontraban representantes del PP y Vox, han señalado a este gobierno como «el enemigo común».
La manifestación, organizada por la Plataforma por la España Constitucional, tuvo lugar este domingo al mediodía en la Plaza de Castilla. En medio de un mar de banderas nacionales, los manifestantes han gritado consigas como «Nuestro presidente es un delincuente» y «Sánchez, dimisión».
Uno de los momentos culminantes de la protesta fue la lectura de un manifiesto por parte del periodista Albert Castillón, que fue interrumpido repetidamente por gritos de «Sánchez, delincuente», «Sánchez, mentiroso» y «Sánchez a prisión». Castillón afirmó: «No importa tu ideología, hay un enemigo común y ese es Pedro Sánchez», en un discurso donde se criticaron aspectos como «las concesiones a los nacionalistas del cupo catalán», «las presiones inaceptables al poder judicial desde el ejecutivo y el legislativo» y la aprobación de la «inmoral e inconstitucional» Ley de Amnistía.
El líder de Vox, Santiago Abascal, presente en la protesta, declaró que «este Gobierno debe irse a casa y devolver la voz a los españoles». Abascal reafirmó su oposición total al Gobierno, ya sea en solitario o acompañado, y denunció que la administración de Sánchez está envuelta en «prácticas ilegales». «No hay corrupción que no practique», señaló.
El líder de Vox ha señalado que es poco probable que el Gobierno caiga, ya que Sánchez «hará lo que sea para mantener el poder» y se muestra «dispuesto a recurrir a cualquier medio disponible». Sobre la posibilidad de una moción de censura por parte del PP, ha expresado su interés en entender los motivos de Alberto Núñez Feijóo para presentarla, aunque ha afirmado que la apoyaría bajo ciertas condiciones. Abascal ha manifestado su incertidumbre sobre si el PP efectivamente llevará a cabo esta acción, y ha criticado que el partido esté «prolongando este debate innecesariamente». Según él, el hecho de que el PP haya votado en contra en una moción y se haya abstenido en otra es un dato relevante en la situación actual.
Por su parte, el Partido Popular también participó en la manifestación. Carmen Fúnez, vicesecretaria de Organización Territorial, justificó la falta de Feijóo debido a «asuntos personales» y destacó que «nunca antes en democracia habíamos enfrentado un momento tan crítico». Aseguró que la ciudadanía está «agotada» de la «mentira», la «falta de transparencia» y la «corrupción» del Gobierno de Sánchez. Fúnez subrayó que la única forma de abordar esta situación es «reconociendo la voz de la democracia y de los españoles», y recomendó a Sánchez reflexionar sobre su futuro, sugiriendo que «las cosas no mejorarán para él». También mencionó que el fiscal general, Álvaro García Ortiz, actúa como el «ministro 23» y que su imputación marcaría un cambio significativo, por lo que demandó su renuncia y que evite la «estrategia de atrincheramiento» que, según ella, está llevando a cabo Sánchez en la Moncloa.
La política del Partido Popular ha manifestado que el Ejecutivo carece de una agenda clara y de una gestión efectiva, afirmando que «cuando hay un gobierno con once ministros involucrados en un escándalo de corrupción, su prioridad parece ser protegerse, descuidando así la atención a los servicios públicos y a los temas que realmente importan a la ciudadanía». Además, señaló que «al final, son más los miembros del Ejecutivo que utilizan su posición para resguardarse ante la corrupción que para atender a los ciudadanos», citando como ejemplo al ministro Óscar Puente. Por su parte, Alfonso Serrano, secretario general del PP en Madrid, ha destacado que la situación actual del Gobierno es «totalmente insostenible», sin una dirección clara y centrada únicamente en «atacar» cualquier forma de «disidencia». También le dirigió un mensaje a Sánchez, resaltando que, a pesar de sus intentos de menospreciar a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, «nada podrá ocultar la corrupción que afecta al PSOE, al Gobierno y al propio presidente».
