Durante esta semana, la reina Letizia ha decidido llevar su agenda de manera más tranquila, preparándose para el 12 de octubre, Día de la Hispanidad, un evento donde regularmente nos sorprende con un atuendo totalmente renovado. Cada año, Letizia asiste junto al rey Felipe VI y, en esta ocasión, también se suma la princesa Leonor a las diversas actividades de la Fiesta Nacional, las cuales comienzan por la mañana y se extienden hasta bien entrada la noche.
Con el fin de estar lo más descansada posible, consideran sus problemas en los pies, la reina fue vista el día de ayer por la tarde, donde estuvo presente, junto a Felipe, en la ceremonia de entrega de los premios Nacionales de Cultura 2022 y 2023 en el Museo Nacional de Arte Reina Sofía.
Uno de esos galardones fue para Penélope Cruz, reconocida por su cinematografía en 2022, destacando su papel como referente de una generación que renovó el cine español en la década de los 90, participando en varias películas emblemáticas y aclamadas a nivel internacional. A pesar de ello, la actriz de Madrid no asistió para recibir su premio. Aunque no pudimos ver la famosa imagen de la reina junto a Penélope, la ceremonia no defraudó, ya que Letizia mostró uno de los looks más atrevidos que ha lucido en eventos similares, fusionando elementos tradicionales con las últimas tendencias. En la entrega del año anterior, la reina optó por un vestido que generó mucha controversia, por ser de una marca británica en lugar de española, considerándose «algo excesivo» y con un precio que alcanzó los 2.990 euros. En esta ocasión, Letizia eligió un vestido blanco midi que no habíamos visto antes, con un diseño de mangas cortas adornadas y detalles de bordado en la parte superior y el dobladillo, complementado con suaves transparencias.
Al acercarnos, podemos notar que este guipur está embellecido con diminutos adornos plateados. La reina ha utilizado este pequeño elemento para coordinar sus zapatos, optando esta vez por unos tacones moderados de Magrit, que son destalonados. No obstante, lo que realmente nos llama la atención de ellos es su tonalidad, un plateado que sigue las últimas modas y que pronto podremos ver en la infanta Sofía. La hija menor de los monarcas españoles suele elegir calzado plano, pero cuando decide usar tacones, prefiere un ‘kitten heel’ para que la diferencia de altura con su hermana no sea tan marcada. Este detalle, combinado con su color, hará que se convierta en uno de los favoritos de la joven representante de la generación Z en el Palacio de La Zarzuela.
