El exmandatario español José María Aznar ha señalado que es probable que en esta legislatura se realice un referéndum en España sobre la figura del jefe del Estado. Durante el evento conmemorativo del tercer aniversario de OkBaleares, efectuado en Palma, Aznar criticó al actual Gobierno español por iniciar un proceso de «desconstitucionalización», citando específicamente la ley de amnistía y el acuerdo económico con Cataluña.
Indicó que los próximos pasos podrían incluir una consulta sobre la autodeterminación en Cataluña y un debate abierto respecto a la Jefatura del Estado.
Aznar comentó que es complicado encontrar un ambiente tan cargado como el actual en España y sugirió que esta problemática podría resolverse con nuevas elecciones.
También expresó su desaprobación acerca del uso de pinganillos en el Congreso para comunicar en lenguas cooficiales, señalando que esto va en contra de la tolerancia y de lo que establece la Constitución. Afirmó: «Si yo fuese diputado, jamás utilizaría un pinganillo», destacando que «no tiene sentido» que representantes de la soberanía nacional deban emplear estos dispositivos.
Además, Aznar calificó de «canallesca» la coalición entre el Gobierno de Pedro Sánchez y Bildu, argumentando que su objetivo es «destruir España» y su marco constitucional. En cuanto a la relación entre ambos, rechazó la idea de que Sánchez sea un «rehén» de Bildu, afirmando que dicho acuerdo es una elección del propio presidente. Resaltó que el Gobierno actúa en complicidad con Bildu, lo cual considera inaceptable desde un punto de vista moral y político.
En este escenario, ha resaltado que es «una víctima del terrorismo», una situación que «casi nunca» ha mencionado, pero que lo ha acercado a todas las personas afectadas «porque ha sufrido y ha tenido el privilegio de sobrevivir». El exmandatario ha destacado que cualquier nación debe contar con fundamentos éticos y morales, que «bajo ningún concepto» deben incluir la legitimación ni la liberación de aquellos que tienen graves acusaciones de delitos violentos «contra los españoles, la democracia y la nación española». Durante sus dos mandatos en el Palacio de la Moncloa, afirmó que el terrorismo fue «superado y deslegitimado», Batasuna se prohibió y se instauró la ley de partidos. A partir de 2004, con el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, se inició «la agenda progresista por la paz» y se abrió una negociación política con los grupos terroristas. Actualmente, bajo la administración de Pedro Sánchez, se está llevando a cabo una nueva negociación con los «sucesores de ETA», refiriéndose a Bildu. Aznar ha expresado su desaprobación hacia el «blanqueamiento» de Bildu por parte del Gobierno, la transferencia de competencias sobre prisiones al País Vasco, la concesión del tercer grado a quienes cometieron actos terroristas y el hecho de que Bildu sea «esencial» para la investidura de Sánchez como presidente con sus votos.