Este miércoles, la tensión volvió a ser palpable entre Marta Riesco y Víctor Sandoval durante un intenso debate en el programa Ni que fuéramos. Ambos no escatimaron en expresar su desagrado mutuo. La controversia se originó cuando Riesco hizo una declaración que transformó el ambiente de la discusión: mencionó la existencia de un vídeo que, presuntamente, evidenciaría una infidelidad de Kiko Rivera.
En ese momento, la reportera, sustituyendo a la presentadora habitual, María Patiño, aseveró la autenticidad de este material. «Ese vídeo es clave y respalda bastante lo que dice Támara», comentó, dirigiéndose también a Irene Rosales, esposa del DJ: «Si yo fuera Irene, preferiría no verlo».
La noticia generó una reacción rápida de Sandoval, quien, más allá de indagar sobre el contenido de la grabación, recordó algún momento anterior en la vida de su compañera. «¿Y tú con Antonio David en aquella discoteca que le hablaste tanto?”, lanzó. Ante esta provocación, Riesco, claramente incómoda, replicó: «Sé que te incomoda que esté presentando y tú no, pero no me cuentes eso…». Sandoval, por su parte, desmintió cualquier insinuación de celos. «¿De verdad crees que te voy a tener envidia por presentar? ¡Estamos locos! Soy como Gandhi, buscando la paz mundial», bromeó, mientras se mostraba con un atuendo que hacía referencia al famoso líder. Acto seguido, Riesco, visiblemente enfadada, le cuestionó al comentarista por qué había traído a colación un asunto irrelevante. «Fue tan pertinente como tu anécdota con Antonio David. Era totalmente relevante… Te grabó Frigenti», respondió.
Desde ese instante, el diálogo se convirtió en un intercambio de acusaciones continuas. Marta Riesco, intentando recuperar la dirección de la charla, mencionó una de las relaciones más publicitadas del colaborador: «No voy a sacar a Nacho Polo». Sin inmutarse, Sandoval respondió: «Sácalo, no tengo inconveniente. Es parte de mi pasado. No me avergüenzo de mi vida». Las recriminaciones de ambos aumentaron en intensidad, hasta que Riesco, tratando de calmar las aguas, expresó: «Vengo a dialogar, no a gritar». Sandoval, molesto, la cuestionó: «¿Acaso me llamas vaca? ¿O oveja? ¿Me tratas como un animal? ¿No puedo referirme a ti de una forma que no sea humana? Ten respeto», señaló. Sin ceder, Riesco arguyó que la agresividad de Sandoval provenía de su frustración por no estar a cargo del programa. Esta acusación no pasó desapercibida para él: «Me estás decepcionando mucho». Por su parte, la periodista mantuvo firme su posición. «Es un comportamiento muy poco solidario (…) Acabas de bajar el nivel conmigo, muy bajo. Es la segunda ofensa y no habrá una tercera», le advirtió. Luego, Sandoval lanzó lo que sonó como un ultimátum: «Ya no te voy a tolerar ni esto». La discusión continuó hasta que el director del programa, David Valldeperas, tuvo que intervenir, poniendo un punto final a la pelea con un rotundo: «Hasta aquí».
