Erik y Mirtha, que competía por su amor, acordaron encontrarse con el resto de las participantes de ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, en un bar tras su encuentro. «No me lo esperaba en absolá», se escuchó, mencionado entre los demás comentarios, debido a que llegaron juntos, mostrando mucha sintonía.
Tamara no tuvo reparos en expresar sus pensamientos, formulando una pregunta acusatoria a ambos: «¿Acaso ya sois una pareja nomás?». Erik justificó que era «solo confianza». Pero fue Mirtha quien explicó cuán bien había transcurrido su encuentro. «Hubo un acercamiento notable, coqueteo, caricias, miradas e incluso un beso», reveló.
Camelia arruinó el momento al desinflar las expectativas de Mirtha. «Estás en segundo lugar, porque la primera en besarle fui yo», admitió. «Cuando olvidé mi máscara, me topé con Erik y nos dimos un beso», añadió. El pretexto había sido el sabor del batido que había consumido antes. «Le agradó, ya que mencionó que estaba delicioso», narró ella. Tamara se enfureció al descubrir esto, al no haber vivido una experiencia similar con Erik. «Me parece injusto que aproveches mientras las restantes estamos en el baño, te escabullas y lo beses», se lamentó.
