El líder de la Generalitat, Salvador Illa, ha expresado su descontento este domingo con aquellos que, al tiempo que reducen impuestos, solicitan más fondos. Estos comentarios parecen estar dirigidos a las regiones gobernadas por el Partido Popular que han aplicado recortes fiscales en los años recientes.
Illa ha reafirmado que Cataluña mantendrá su solidaridad con todo el país. En el evento Fiesta de la Rosa del PSC, que congregó a 10.000 personas, el presidente catalán subrayó su compromiso de defender «con pasión» la financiación particular para Cataluña y de respaldar un modelo de «España diversa» en todas las instituciones de decisión.
«Cataluña ha regresado. Cataluña regresa para mejorar España», destacó Illa, puntualizando su deseo de reestablecer la primacía económica nacional, promoviendo un modelo distinto al de otras regiones manejadas por el Partido Popular, como Madrid. «Cataluña retorna para demostrar que es viable encabezar económicamente a España ejerciendo políticas progresistas y de izquierdas, sin disminuir impuestos ni efectuar acciones incomprensibles que desconciertan a muchos», afirmó Illa, indicando que «algunos se han alterado». El mandatario catalán se ha comprometido a honrar los acuerdos de investidura que le posibilitaron asumir la Generalitat, que involucran la financiación particular acordada con el Partido Republicano de Cataluña, al mismo tiempo que aseguró que Cataluña continuará mostrando solidaridad con el resto de los territorios. «Cataluña está y permanecerá a la vanguardia de la solidaridad. No somos dados a dar lecciones, pero tampoco vamos a recibir lecciones de solidaridad de quienes, mientras reducen impuestos, piden más recursos. Eso no es solidaridad, eso es algo distinto», reiteró Illa.
En medio de las discusiones concernientes a la financiación autonómica, Salvador Illa, Presidente de la Generalitat, asegura que su gobierno jugará un papel importante en todas las posibles instancias de toma de decisiones. «Nos uniremos a los demás territorios de España para compartir nuestra ideología y modelo, y para escuchar las propuestas que los demás puedan presentar, con respeto pero con decisión», indicó. Durante su primera Fiesta de la Rosa como presidente, Illa promovió las políticas progresistas y animó a formar «coaliciones amplias de izquierdas» para prevenir el avance de la extrema derecha y los mensajes de odio. Reafirmó que su Gobierno es «de todos y para toda la nación» y prometió que su administración entrará en acción para trabajar arduamente: «No haremos milagros, pero trabajaremos». En conclusión, prometió llevar a cabo una «triple revolución»: «La del buen gobierno, para atender problemas concretos; la de la normalidad, para convertirse en un gobierno normal para un país normal, y la del respeto y la educación». Finalmente, Illa criticó a aquellos que «demuestran mayor necesidad de recursos mientras reducen los impuestos», en una obvia referencia a las comunidades gobernadas por el PP que han disminuido sus impuestos en los últimos años, y reiteró que Cataluña mantendrá su solidaridad con toda España.