Un juez en Tanzania ha decretado la pena de muerte por ahorcamiento este domingo para Sudy Omari, quien mató a un hombre tras una confrontación en relación a un deber de 3000 chelines (aproximadamente un euro). Omari había pagado dicha suma a la mujer de su víctima, Joseph Misgaro, para asistirlo en la recolección de maíz.
El Citizen, un periódico de Tanzania, ha informado que Omari se alteró cuando Misgaro no completó el trabajo acordado a tiempo, lo que llevó a un altercado que culminó con la muerte de Misgaro tras una fractura craneal. El magistrado, John Nkwabi, señaló que la fiscalía probó concretamente la culpa de Omari.
La evidencia presentada en el caso confirmó la intención de Omari de asesinar a Misgaro, posiblemente debido a su frustración por el trabajo inconcluso. Omari, en su defensa, ha insistido que estaba volviendo a su hogar después de su trabajo en una cantera cuando los hijos de Misgaro lo confrontaron y le pidieron que fuera al lugar donde su padre yacía en el suelo. Sorprendido por la acusación, Omari solicitó su exoneración.
