Kiko Matamoros, a lo largo de los años, se ha consolidado como uno de los colaboradores más destacados de la televisión, especialmente en Telecinco, donde se ha desempeñado exitosamente como comentarista tras participar en una extensa lista de programas. Entre los más memorables se encuentran Sálvame y Crónicas Marcianas.
Recientemente, ha compartido algunas anécdotas sobre este último en el podcast Special people club, conducido por Esty Quesada, una gran seguidora del programa que antiguamente presentaba Javier Sardá. Al ser preguntado sobre sus recuerdos de esa época, Kiko, que en aquel entonces era uno de los colaboradores más relevantes del programa, confiesa que fue una etapa en la que se producía una televisión audaz e innovadora, que sería inimaginable en la actualidad.
Además, mencionó que era muy entretenido trabajar allí debido a la gran libertad que se tenía, a la creatividad y al profundo conocimiento del medio y de las necesidades del público. Matamoros también habló sobre el papel del presentador Sardá, a quien describió como un maestro que tenía un control absoluto de todo lo que sucedía en el plató. Sin embargo, también mencionó su desilusión con la negación de Sardá de su papel en el programa. Por último, ofreció un detalle sorprendente sobre la generosa remuneración que recibía por cada aparición, que al parecer era considerablemente superior a lo que ganaba su hermano.
