El pasado viernes, un avión procedente de Venezuela realizó un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto Camilo Daza, ubicado en la ciudad colombiana de Cúcuta, de acuerdo con la confirmación del presidente colombiano, Gustavo Petro. Información adicional fue proporcionada posteriormente por la Autoridad Aeronáutica de Colombia.
Petro manifestó que según los informes recibidos, el aterrizaje de la aeronave venezolana en Cúcuta se debió a una emergencia, desestimando las especulaciones sobre una posible entrada no autorizada al país. La Autoridad Aeronáutica precisó que el avión, un Cessna S-550 Citation S/I, recibió la autorización correspondiente debido a la situación de emergencia, conforme a las regulaciones de la aviación colombiana.
Citaron el Convenio de Chicago, que permite las escalas técnicas en territorio colombiano y el uso de aeródromos en situaciones de emergencia, como el incidente actual que surgió debido a una confusión con pistas cercanas. Las autoridades colombianas hicieron hincapié en su compromiso con los acuerdos internacionales y su responsabilidad en proporcionar asistencia a las aeronaves que se encuentren en riesgo en su territorio. Citaron que se han autorizado los medios de asistencia necesarios y que se ha permitido el despegue de la aeronave para que continúe su ruta hacia su destino final. Como autoridad aeronáutica, consideran que el avión no entró sin permiso a Colombia y que todo se debió a una aeronave en peligro. Medios colombianos reportaron anteriormente que el avión venezolano transportaba a cinco personas, entre ellos, dos presuntos militares de las Fuerzas Armadas de Venezuela.
La tripulación, por un error en la interpretación de la ruta programada, ha aterrizado en Colombia, como se ha confirmado.
