La Benemérita está examinando a dos individuos por sospechas de crueldad animal y posesión no autorizada de armas, en relación a dos incidentes distintos que involucraron disparos a gatos en Valladolid (Castilla y León). De acuerdo a la información revelada el sábado por la Guardia Civil, el primer evento tuvo lugar en Renedo de Esgueva, una localidad de Valladolid.
Durante las primeras horas del 24 de agosto, un individuo armado con un rifle con mira telescópica y una linterna mató a un gato doméstico que se encontraba en un descampado. Al momento de la inspección, la Guardia Civil halló en el terreno tres casquillos de bala calibre 22, además del cuerpo del animal.
Recogieron entonces las pruebas para llevar a cabo los análisis forenses correspondientes. El sospechoso es un excazador y tiene conocimiento en el manejo de armas. Sin embargo, actualmente no tiene un permiso de armas. De esta manera, la Guardia Civil no sólo está llevando adelante un proceso legal por maltrato animal presunto, sino también por posesión no autorizada de armas de fuego. El segundo incidente tuvo lugar en Cuenca de Campos, donde un hombre hirió a un gato que se encontraba en el muro de su propiedad. El propietario fue quien escuchó los disparos, y vio a su gato correr asustado hacia él con una herida sangrante en el cuello. El gato sobrevivió con varias lesiones, gracias a la asistencia veterinaria.
El pitbull de grandes dimensiones que ha acabado con la vida de su dueño de 26 años será presumiblemente sacrificado tras lo sucedido.
El presunto asesino en serie queda con los hombres a través de apps de citas y posteriormente los droga para robarles en Bilbao.