La detención de un dueño de empresa y la investigación de otras dos personas ha sido realizada por la Policía Nacional, esto tras la muerte de un empleado ocurrida el 23 de julio pasado en una constructora de Écija en Sevilla, cuando quedó atrapado debajo de una placa de concreto que pesaba más de cuatro toneladas.
A través de un comunicado, la policía expuso que realizó las investigaciones el Grupo Local de Investigación, debido al incidente en una fábrica de casas prefabricadas de la localidad, donde un suceso parecido había ocurrido en 2007 costándole la vida a otro trabajador.
Los oficiales, al arribar a la escena, concluyeron que el percance ocurrió por «la operación de carga de las placas de concreto» efectuada por un empleado utilizando una grúa, la cual se usaba para trasladar las placas a un camión para su traslado. El accidente que resultó en la muerte del conductor del camión de transporte se produjo debido a que una placa no fue colocada o sujetada de manera adecuada causando su caída sobre él. Según la investigación, este incidente accidente podría haberse prevenido «si se hubieran cumplido con las medidas básicas de seguridad requeridas para este tipo de trabajo considerado peligroso».
El estudio evidencia «varias imprudencias» y «una actitud negligente por parte de la empresa», que sabía de los posibles riesgos al haber experimentado un incidente anterior similar, «debiendo haber aplicado más rigurosidad para asegurarse que nadie ingresara a la zona de operación». El empresario detenido fue presentado al Juzgado de instrucción de guardia de Écija y puesto en libertad con cargos al igual que las otras dos personas investigadas, por homicidio imprudente grave y un delito contra los derechos laborales.