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Andalucía no desea quedarse atrás en la carrera de reducciones fiscales, después de enfrentar una competencia con Ayuso

El Gobierno de Andalucía, encabezado por Juanma Moreno, está considerando una «revisión quirúrgica» de los impuestos. A pesar de que Moreno ha expresado preocupaciones acerca de llegar al «límite» de su capacidad de gasto, no se descarta la idea de una rebaja impositiva selectiva.

Cuando asumió el poder, Moreno puso en marcha la reducción masiva de impuestos con la intención de terminar con lo que llamo el «infierno fiscal» instaurado por el PSOE en Andalucía. Durante su mandato de seis años que cumple en enero, ha implementado seis alivios tributarios, incluyendo un beneficio notable en el impuesto al patrimonio que generó preocupaciones en Madrid y Barcelona.

Aunque Moreno desea continuar en la competencia fiscal, la maniobra será una prueba ya que ha admitido alcanzar la frontera de su capacidad de desembolso.

Durante una comisión parlamentaria, Carolina España, la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, reveló que su departamento está actualmente elaborando posibles ajustes fiscales para el presupuesto del 2025. La nueva portavoz del gobierno de Andalucía detalló que estos ajustes podrían estar relacionados con el área de la vivienda, familias y empresas. Esta afirmación coincide con el historial político del gobierno de Juanma Moreno, sin embargo, es relevante tomar en cuenta las preocupaciones que el presidente ha manifestado en referencia al gasto que puede soportar la Junta, en particular en medio de debates sobre la financiación autonómica.

«Una vez que revisemos todas las propuestas, entonces evaluaremos la disponibilidad presupuestaria», finalizó la consejera de Hacienda. Es importante destacar que este mensaje es cauteloso y coincide con las voces del gobierno autonómico que reafirman que la capacidad para reducciones fiscales ha sido limitada debido a las recientes rebajas fiscales. La ideología dominante desde que Moreno asumió la presidencia defiende que las reducciones de impuestos pueden resultar en mayores ingresos fiscales al impulsar la economía andaluza, pero en la Junta argumentan que han alcanzado el límite de esa capacidad a menos que se pueda asegurar que su implementación fomentará una mayor actividad económica.

España ha detallado que sus especialistas supervisan cada reducción fiscal para valorar si se logra el impacto deseado. Según las cifras defendidas por Hacienda, el resultado es positivo, con un incremento de 600,000 contribuyentes en los últimos años. No obstante, el mayor logro de Moreno es haber posicionado a la comunidad en el centro de la contienda fiscal. En septiembre de 2022, el líder del Partido Popular se trasladó a Madrid para anunciar un descuento en el impuesto de Patrimonio. Esta medida tenía como principal objetivo situar a Andalucía en el punto de mira de las grandes riquezas y competir con la región liderada por Isabel Díaz Ayuso. Esa competencia subyacente persiste. Hace poco, la jefa de gobierno de Madrid introdujo nuevos descuentos en el impuesto de Herencias y Donaciones para familiares de segundo grado.

«Si tomamos alguna acción, será una acción específica, pero eso no significa que dejemos de solicitar los 1.500 millones de euros que necesitamos cada año», sostuvo Carolina España en San Telmo. A través de esta postura, la ministra de Hacienda se defiende de las críticas del PSOE, que ha escogido defenderse en la confrontación financiera enfocándose en las reducciones fiscales aprobadas en los últimos años por los gobiernos regionales del PP, liderados por Juanma Moreno. El mismo ministro de Economía, Carlos Cuerpo, advirtió al Gobierno andaluz en una visita a Sevilla el pasado viernes. «No se puede tener todo», fue la afirmación del líder socialista cerca de la oficina del Gobierno regional.

La discusión se dio en la semana que Pedro Sánchez convocó a los primeros líderes regionales para una serie de encuentros destinados a tratar la financiación autónoma. La propuesta fue rechazada vehementemente por el PP, liderado por Díaz Ayuso, aunque los diversos líderes populares dejaron a su colega capitalino en claro que no pretendían ignorar al presidente. «Vamos a llevar muchos documentos», aseguraron desde la administración de Juanma Moreno sobre la reunión programada para el próximo viernes a las 16:00 horas en el Palacio de la Moncloa.

La línea infranqueable tiene que ver con la negociación bilateral en temas de financiación autonómica. Esta creencia llevó al gobierno de Andalucía a renunciar, por ejemplo, a negociar el fondo de nivelación que constantemente solicitan al gobierno central de forma bilateral. En la Hacienda, afirman que este es un problema que afecta directamente a otras regiones, refiriéndose a la Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla y León, que son otros territorios afectados por el modelo de financiación aprobado en 2009 y que ha estado obsoleto durante una década. Sin embargo, van más allá e introducen la discusión al resto de las comunidades, ya que, reiteran, el posible fondo de nivelación afectaría las cuentas de todas las regiones del régimen común.

Carolina España aseveró que la defensa de Andalucía no es un deber que se pueda descartar. Enfatizó que es necesario abordar este tipo de cuestiones en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Miembros de su departamento indicaron que existe un panel dentro de dicho organismo, donde los expertos se reúnen para discutir sobre la reformulación del sistema financiero, entre otros temas pertinentes, como la remisión de la deuda prometida por el Gobierno. El documento aprobado en el Parlamento Andaluz en 2018, bajo el auspicio de María Jesús Montero, se utiliza como punto de referencia en Hacienda. Dicho documento se creó para ejercer presión sobre el gobierno de Mariano Rajoy, sin embargo, ahora este añade presión sobre la líder socialista.

Andalucía no está en condiciones de soportar una disminución masiva de impuestos. Aun así, es posible que no se descarte una pequeña reducción en el gobierno de Juanma Moreno. Este líder popular asumió la misión de terminar con el «infierno fiscal» que el PSOE había implementado en Andalucía al llegar a San Telmo. Moreno implementó la «reducción masiva de impuestos», lo cual correspondía con su narrativa al tomar el poder. En los seis años que ha estado al frente de la Junta de Andalucía, se han llevado a cabo seis recortes fiscales, algunos de ellos tan destacados como la exoneración del impuesto al patrimonio que causó preocupación en Madrid y Barcelona. Moreno busca competir en términos fiscales, pero se le está agotando el ímpetu después de admitir que se acerca al «límite» de su capacidad de gasto.

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