El viernes pasado, la Policía Nacional llevó a cabo el arresto de los ocupantes de un vehículo que intentaron evadir a las autoridades cuando se les solicitó detenerse. Uno de los individuos ya tenía una orden pendiente para ingresar a la cárcel.
En el sur de Madrid, la tensión se apoderó de las calles durante la noche del viernes, debido a un incidente que involucró a los ocupantes de un automóvil Jaguar que trataban de huir de la Policía Nacional. Este preocupante incidente, que fácilmente pudo haber terminado en tragedia, involucró disparos, conducción a alta velocidad, un intento de atropellamiento y tres arrestos, tal y como confirmaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Todo sucedió alrededor de las 21:00 horas en la calle Corindón, a un tiro de piedra de la Caja Mágica. Los ocupantes del vehículo de lujo hicieron caso omiso a la orden de detenerse de una patrulla policial, dando inicio a una frenética huida. Durante su escape, intentaron atropellar a uno de los oficiales, de acuerdo a fuentes consultadas. Se produjo una persecución de aproximadamente 1,5 km por calles normalmente concurridas, particularmente el viernes en ese horario. Este incidente, informado primero por el El Mundo, resultó en un oficial herido. Para persuadir a los fugitivos a desistir de su fuga, los uniformados realizaron múltiples disparos al aire que no hirieron a nadie. No hubo más lesiones humanas que lamentar, excepto el oficial. La razón para la huida fue que el conductor del vehículo Jaguar tenía precedentes delictivos y una orden de arresto. La persecución culminó en la calle Eduardo Barreiros, en el mismo distrito de Usera, a solo cinco minutos en coche desde el comienzo. Varios automóviles de la policía colaboraron en la persecución, finalizando con los tres individuos arrestados y trasladados a la comisaría.