El pariente de un chico de 13 años de Morón de la Frontera (Sevilla) que desapareció en septiembre de 2021 organizó una concentración frente al Ayuntamiento para marcar el tercer aniversario de su desaparición. El menor fue llevado por su madre en un viaje y nunca más se le volvió a ver.
La madre fue encontrada en Segovia proporcionando explicaciones vagas y violentas, insinuando que había acabado con la vida del joven. El portavoz de la familia, Luis Núñez, pidió justicia en nombre de la familia, señalando que tres años después, el caso sigue prácticamente en el mismo punto.
La madre del niño, supuestamente responsable de su muerte, está en libertad y aún no hay juicio programado. Núñez lamentó la falta de progresos en la investigación. El caso se refiere a una pareja de Morón con dos hijos, una adolescente de 18 años y un adolescente de 13 años con discapacidad física, quienes habían sido separados y la madre había obtenido la custodia de los niños. En septiembre de 2021, la Guardia Civil ubicó a la madre en una vía de Segovia, confundida y dando declaraciones poco coherentes. Según las autoridades, ella afirmó haber matado a su hijo y se habría deshecho del cuerpo.
Perteneciente a la realidad de la mujer, quien se presume sufre de trastornos mentales, esta fue reubicada al área psiquiátrica del hospital Segovia para obtener atención especializada. Luego, la Guardia Civil se comunicó con el padre del niño y ex cónyuge de la mujer, para indagar sobre el paradero del menor. Desde Morón, tanto el padre como la hermana del niño expresaron a las autoridades que suponían que el chico estaba con su madre, siendo puestos al corriente del testimonio de esta mujer. Tras escuchar el relato de la madre, quien habría afirmado haber asesinado a su propio hijo y haberse desecho del cuerpo, el padre procedió a la Comisaría de la Policía Nacional de Morón para reportar la desaparición del chico. La madre por su parte llevó consigo al menor. Como resultado, los agentes de la Policía Nacional de Morón acudieron al domicilio de la mujer, descubriendo que habría abandonado sus pertenencias y se habría ausentado el 12 de septiembre de 2021, llevándose consigo al niño. Según las indagaciones de las autoridades, esa noche habrían pernoctado en un hotel de Talavera de la Reina (Toledo), donde ambos fueron vistos, y luego habrían continuado su viaje, siendo posteriormente la mujer encontrada en soledad por la Guardia Civil en las condiciones previamente descritas. En todo caso, la Policía Nacional conserva una investigación en curso para ubicar al menor y confirmar o desmentir la veracidad del testimonio inicial de la madre, quien luego habría asegurado que no asesinó al chico propiamente dicho, sino que este «falleció» y luego ella se deshizo del cadáver.
Dentro de este contexto, un procedimiento de la Policía Nacional llevado a cabo el 21 de septiembre de 2021 revela que oficiales de dicha entidad realizaron un «paseo» junto con la madre del niño perdido, su abogado y un enfermero de la sección de Psiquiatría del hospital general de Segovia. El informe detalla que, tras pasar por «la salida del kilómetro 6,100, Ciudad de la Imagen, M-511,» el grupo ingresó a «la calle Illescas» de Madrid. Allí, al llegar al primer edificio, la investigada identificó sin dudar esa localidad como el lugar donde, según sus propias palabras, «arrojó a su hijo en un contenedor».
Según la recreación de los sucesos proporcionada por los investigadores, la mujer señaló específicamente un contenedor gris con tapa marrón en el que ella habría colocado al niño. El informe precisa que la empresa encargada de gestionar los residuos en esa zona es FCC Medio Ambiente e Infraestructuras. Además, señala el número del camión que recogió los contenedores de esta calle el 13 de septiembre de 2021. Los desechos recolectados ese día fueron posteriormente descargados en el basurero del parque de Peromingómez.
Por otro lado, un informe realizado en julio de 2022 por la Sección de Análisis de Conducta de la Unidad de Inteligencia Criminal de la Policía Nacional, en relación al testimonio de la madre del niño, sugiere que ella podría haberse quitado su propia medicación. Este sería el desencadenante del «inicio de sus síntomas delirantes».
De lo inferido del examen a su testimonio, la salud de su hijo parece haberse «deteriorado» durante la semana del 6 al 12 de septiembre de 2021, según afirma la mujer. Ella está «convencida de que su hijo murió en su casa durante esos días», pero con la «convicción» de que «reviviría saludable», razón por la cual «huyó de su casa, no informó de su muerte, le llevó comida y ropa y tiró los medicamentos». Además, el informe sugiere la posibilidad de que el «temor a las repercusiones penales» podría haberla impulsado a «deshacerse del cuerpo», aunque no es posible «confirmar» si ella «disminuyó la medicación de su hijo o la eliminó por completo».
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