El pasado miércoles, Chad McQueen, hijo de la estrella de cine estadounidense Steve McQueen, falleció en su residencia en Palm Springs. A los 63 años de edad, el heredero de esta prominente figura de Hollywood dejó al mundo, según comunicó su familia.
Jeanie, su esposa, y sus hijos Chase y Madison contaron la noticia a través de un comunicado recogido por Variety: “Lamentamos profundamente informar sobre el deceso de nuestro padre. Destacó por ser un progenitor amoroso hacia nosotros y su profundo compromiso con nuestra madre.
Su vida demostró abundantes muestras de amor y dedicación. Tenía un entusiasmo especial por las carreras automovilísticas, no solo demostrando un talento excepcional sino también como forma de honrar la herencia de su padre y las enseñanzas que él le transmitió”. Chad McQueen emuló a su padre Steve, tanto en su carrera cinematográfica como en su amor por las carreras de autos. Su verdadero interés yace en los deportes automovilísticos, participando en eventos como las 24 horas de Le Mans y las 12 horas de Sebring, e incluso creando su propia compañía, McQueen Racing. En 2006, vivió un terrible accidente mientras se preparaba para la Rolex 24 en Daytona International Speedway que casi le cuesta la vida. A pesar de recuperarse, este incidente marcó el fin de su vida como piloto, manteniendo sin embargo su conexión con el automovilismo a través de su empresa y otros proyectos paralelos. En cuanto a su carrera actoral, aunque no fue tan amplia y comenzó a reducirse a lo largo de los años 90, tuvo la oportunidad de formar parte de una serie exitosa: Kárate Kid. En 1984, McQueen caracterizó a Dutch, parte del equipo Cobra Kai. Este personaje hostigaba a Daniel LaRusso (Ralph Macchio) cuando éste arribó a la ciudad y animaba a Johnny Lawrence (William Zabka) a golpearle fuertemente durante una pelea.
McQueen retomó su papel de Dutch en la continuación de Kárate Kid, que se estrenó en 1986. Aunque hubo rumores de su participación en la serie Cobra Kai, su apretado calendario no lo permitía. Además de Kárate Kid, las películas en las que McQueen participó incluyen títulos de acción como Nightforce, Martial Law y Manhunt, entre 1989 y 1992. A menudo asumía roles secundarios, como ocurrió en una producción japonesa (Lethal Weapon) y en la comedia de Barry Levinson Jimmy Hollywood. No obstante, McQueen obtuvo roles principales en ciertos films de bajo presupuesto de la década, como Dangerous Goods, Fan number one y Squanderers.
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