Durante la noche del miércoles en El rival más débil, Luján Argüelles, la anfitriona del programa, se destacó más que los ocho políticos que participaron en la segunda emisión. Sin ningún recato, Argüelles puso en su lugar a los políticos participantes.
Durante las pausas entre las rondas, aprovechó para lanzar comentarios mordaces como: «Esto no es el Congreso, aquí se responden preguntas» y «¿Quién gusta de lavar su ropa y su dinero?», en referencia a la polémica política. También bromeó diciendo: «¿A quién confunde Orgullo y Prejuicio con un lema de campaña?».
Criticó a los políticos por focalizarse en estrategia y no en beneficencia: «Es evidente que lo único que buscan en la vida es mantener su posición». «¿Quién cuenta con la mínima competencia para dar un discurso político?», fue otra de sus cuestiones retóricas. A pesar de las críticas, los políticos no se defendieron, sino que aceptaron bien las críticas. Susana Díaz, por ejemplo, se rió a carcajadas ante varias de las ocurrencias de Argüelles.
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