Luis Bárcenas, ex tesorero del PP, y su esposa, Rosalía Iglesias, no tendrán que pernoctar en el Centro de Inserción Social (CIS) Victoria Kent, donde se encontraban cumpliendo su condena. La Junta de Tratamiento del CIS ha acordado modificar su tercer grado de condena para que ambos puedan permanecer en casa pero bajo control telemático.
De esta forma, no tendrán que regresar al CIS de lunes a jueves, como solían hacerlo antes. Esta resolución se basa en el artículo 86.4 del Reglamento Penitenciario y no requiere la aprobación del Ministerio del Interior. Sin embargo, aún tendrán que hacer visitas al CIS una vez al mes para comprobar el cumplimiento del control telemático.
La modificación de su régimen ha sido notificada por europa press y adelantada por ‘El País’.
Desde que ingresó en la cárcel de Soto del Real en Madrid para cumplir su sentencia de 29 años y un mes por el primer periodo del caso Gürtel, Bárcenas ha tenido varios permisos penitenciarios. Mientras tanto, Iglesias comenzó a cumplir su condena de 12 años y 11 meses en la prisión femenina de Alcalá-Meco. Ambos están en tercer grado, pero Bárcenas pudo abandonar la cárcel para completar su sentencia en un CIS gracias al artículo 100.2 del Reglamento penitenciario que el Ministerio de Interior le aplicó en diciembre de 2022.
Bárcenas fue enviado a prisión preventiva a mitad del año 2013 y fue liberado bajo fianza el 22 de enero de 2015. Retornó a prisión en mayo de 2018 después de la sentencia de Gürtel. Se dictaminó que el límite de cumplimiento seria de 12 años, correspondiendo al triple de la pena más grave impuesta, en este caso, delitos de lavado de dinero y contra el Tesoro Público.
Las decisiones de flexibilidad conforme al artículo 100.2, basadas en la propuesta inicial del consejo de tratamiento de Soto del Real, se tomaron después de que el prisionero hubiera cumplido la mitad de la pena máxima privativa de libertad posible.
El Centro de Inserción Social (CIS) Victoria Kent, donde cumplen su condena el ex tesorero del PP Luis Bárcenas y su esposa Rosalía Iglesias, ha permitido que no necesiten volver al centro penitenciario de lunes a jueves para dormir, cuando antes estaban obligados a regresar por la noche. Ahora están bajo supervisión telemática.
