La Guardia Civil ha llevado a cabo la desarticulación de una organización que se dedicaba al comercio ilícito de fármacos, resultando en la detención de tres individuos y la incautación de más de 23.000 dosis de una medicina conteniente de una sustancia ilegalizada y peligrosa, tal y como ha advertido la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
La desarticulación se efectuó gracias a la idea de un trabajador de una compañía de mensajería, quien detectó irregularidades en una sucesión de contratos de servicios.
Las personas encargadas de las realizar los envíos y recibir los paquetes poseían antecedentes penales de delitos de salud pública vinculados con el tráfico de medicamentos fraudulentos.
El fármaco en cuestión era el HHS A1, que según la AEMPS, contiene sibutramina, una sustancia restringida.
La AEMPS ha emitido advertencias acerca de los riesgos de la sibutramina, un supresor de hambre que podría desencadenar afecciones cardiovasculares graves, arritmias, cardiopatías isquémicas y severas interacciones con otros fármacos. Este medicamento se comercializa en sitios web de dudosa fiabilidad.
A partir de la vigilancia de la empresa de transportes, la Guardia Civil interceptó varios paquetes, lo que permitió confirmar el tráfico de sibutramina y decomisar 3.800 dosis más.
Los oficiales descubrieron que paquetes habían sido enviados a Albacete, Sevilla y Huelva. Pero, gracias a la rápida intervención de la Guardia Civil y de la empresa de mensajería, se logró detener y recuperar otras 1,800 dosis, elevando el total de dosis confiscadas a más de 23,000.
En Sagunto, detuvieron a un hombre de 42 años, dueño del local, y de origen español. También se inició una investigación contra un ciudadano portugués de 47 años que participaba en las entregas. Luego se procedió al arresto de otro hombre y una mujer, ambos originarios de España y de 47 y 40 años, respectivamente, en la provincia de Albacete, quienes también estaban involucrados en la distribución del medicamento ilícito.
La Guardia Civil ha logrado desarticular una red de tráfico ilegal de fármacos, ha arrestado a tres individuos, aunque se anticipan más detenciones, y ha confiscado más de 23,000 dosis de un producto que contiene un compuesto activo prohibido, cuyos riesgos ya han sido señalados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).