El sospechoso, un joven de 20 años arrestado por presuntamente asesinar a Mateo, un niño de 11 años, en el municipio toledano de Mocejón el domingo pasado, ha confesado a la Guardia Civil que cometió el delito impulsado por su «alter ego», ya que no pudo contenerse.
Las fuentes cercanas a la investigación han informado a EFE que el acusado tiene un trastorno mental y, de acuerdo con lo que ABC ha publicado, su padre declara que sufre de una discapacidad del 70%.
El joven fue arrestado en la casa de su padre después de haber estado presente en el registro de la casa de su abuela, donde supuestamente cambió de ropa el día del incidente.
La confesión ocurrió en la sede de la Guardia Civil en Toledo el lunes después de su detención.
Por otro lado, la delegada del gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha criticado en una rueda de prensa «a aquellos individuos que siembran odio, quienes se han aprovechado de este trágico suceso, la muerte de un niño de 11 años, para propagar su resentimiento en las redes sociales». Según su punto de vista, las redes sociales «se trasforman en un basurero de vileza y, en la mayor parte de los casos, desde el anonimato, asumen una postura de acusar a todo aquel que difiere de ellos ya sea por su raza, su religión o simplemente, con el afán de obtener beneficio de cualquier circunstancia, incluso si eso significa menospreciar a nuestros semejantes».
Al ser consultada sobre la capacidad del gobierno español para actuar en contra de los instigadores en las redes sociales, la representante de Pedro Sánchez en Castilla-La Mancha ha comentado que la situación debe ser evaluada. Hizo hincapié en que es un problema que involucra a toda la sociedad y exhortó a los más conscientes a enfrentar a los propugnadores de odio, a quienes claramente se sabe quiénes son y cuáles son sus razones.
Por otro lado, en el municipio toledano de Mocejón, la municipalidad hizo un llamado este martes, solicitando a los ciudadanos que la armonía social continúe siendo una prioridad. La idea es asegurar que sean capaces de superar la trágica muerte de Mateo, un niño de 11 años. La localidad tiene fe en que prevalecerá la justicia.
El joven de 20 años que fue arrestado por presuntamente asesinar a Mateo en Mocejón durante el pasado fin de semana, confesó a las autoridades que no logró contenerse, y alegó que actuó su «otro yo». Según han detallado fuentes cercanas a la investigación, el sospechoso confesó su crimen cuando estaba en la comisaría de la Guardia Civil de Toledo, luego de ser arrestado en la casa de su padre, tras haber sido parte del registro de la vivienda de su abuela, lugar donde, al parecer, habría cambiado de vestimenta después del incidente.
Las mismas fuentes señalan que la persona detenida sufre de una condición mental, y, tal y como el ABC ha informado, su padre afirma que tiene un 70% de discapacidad.