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Andújar experimenta su incendio más devastador, con un saldo de más de 500 personas desplazadas: «Desconocemos la suerte de nuestro hogar»

El peor incendio que Andújar ha vivido obliga a evacuar a más de 500 personas: «No tenemos certeza del estado de nuestras viviendas»
El fuego se desató el domingo y ha devastado más de 700 hectáreas. Para el lunes por la noche estaba contenido, pero no dominado.

«Las llamas ya no son visibles», confirmaron representantes de la Junta de Andalucía.
Aunque Andújar ha sufrido otros incendios, este es el más destructivo que los residentes pueden recordar. La alarma de incendio en Andújar, al noroeste de Jaén, se activó en las primeras horas de la tarde del domingo.

El fuego se inició cerca del embalse de Encinarejo, una presa que hace frontera con un Parque Natural. En solo 24 horas, el incendio consumió más de 700 hectáreas y se vieron forzados a desalojar a cerca de 500 personas de sus hogares. A pesar de que la zona devastada está a más de 30 kilómetros del centro de la ciudad (con 35.000 residentes), hay hoteles, fincas y casas rurales en el camino que también alojan a la población local. Los bomberos han contenido el fuego, pero todavía no está bajo control.
«Las llamas ya no son visibles», confirmó el consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, después de 24 horas del inicio del incendio. Sanz anunció que Andújar regresaría a la fase de preemergencia, ya se había declarado el nivel uno de peligro, y que el objetivo ahora es contener lo que queda. «Una vez que los recursos aéreos terminen, empezaremos a permitir que las personas regresen a sus hogares», dijo, con la esperanza de que esto se logre en las próximas horas.

La región está repleta de residencias campestres, conocidas como viñas, algunas de las cuales están peligrosamente cerca de los incendios, provocando temor entre los propietarios. Durante las labores de contención del fuego, la Delegación del Gobierno reportó alrededor de 200 casas desalojadas. Afortunadamente, el viento cambió de dirección, alejando el fuego de varias propiedades y evitando más evacuaciones. Uno de estos casos fue el de Mari Carmen, quien suspiró aliviada el lunes por la tarde.

No obstante, otra casa cercana al complejo turístico Los Pinos, donde reside su hijo, sigue siendo motivo de preocupación, ya que el incendio amenaza la zona y a su heredero aún no se le permite regresar. Mari Carmen confiesa su inquietud diciendo: «No sabemos que sucederá con nuestra casa».

La policía, alrededor de las diez de la noche, se presentó en su domicilio para alertarle del peligro y le instó a abandonar la casa. Un centro de comando fue instalado cerca del área para vigilar y controlar la situación, logrando finalmente estabilizar el incendio al día siguiente por la tarde, a pesar de las complicaciones ocasionadas por las altas temperaturas (40 grados) y la presencia de fuertes vientos.

Antes de que el fuego se extinguiera, el Ayuntamiento identificó tres grupos de evacuados. En su mayoría se trataba de personas que poseen casas de veraneo en la zona, seguido de turistas – ya que en verano la región experimenta un aumento de visitantes – y, en menor medida, residentes permanentes. Estos últimos, tanto visitantes como residentes habituales, fueron alojados en un refugio cercano ante la falta de otra alternativa habitacional.

El Hotel del Val recibió inicialmente a 59 individuos, pero luego solo quedaron 30, puesto que muchos se marcharon durante el curso del día, según Santiago Peralta, el encargado del hotel. Al declararse el incendio, vecinos y forasteros ocuparon cuarenta de las ochenta habitaciones rurales disponibles. Llegaban gradualmente, la mayoría de ellos parecían tranquilos a pesar de la tensión. «No recuerdo haber presenciado algo parecido en toda mi trayectoria», expresó Santiago.

Manuel, un bombero de 53 años en el parque de Andújar, corroboró la singularidad del hecho. Mencionó que ha presenciado diversos incendios durante su carrera, pero nunca uno de tan alto calibre. También refirió que aún desconocen si hubo daños a casas. Este testimonio fue brindado horas antes de la última actualización del consejero de Presidencia. Funcionarios del municipio de Jaén reconocen que no es la primera vez que un incendio se aproxima al Parque Natural Sierra de Andújar; sin embargo, admiten que nunca han enfrentado un evento de tal magnitud e impacto en la comunidad.

El despliegue del dispositivo tampoco fue usual. Aproximadamente 150 efectivos, incluyendo bomberos, guardias civiles y grupos de rescate en zonas montañosas (GREIM), así como otros 50 de seguridad, estuvieron trabajando en el terreno una vez que se declaró el nivel uno del Plan de Emergencias de la Junta de Andalucía. A pesar de que el bosque estaba completamente en llamas, desde el centro de la ciudad solo se podía apreciar un velo gris en la distancia.

Roberto relató desde Casa Juanito, un restaurante en Andújar a unos 35 kilómetros del incendio, que a pesar de la distancia, podían ver grandes columnas de humo. A lo largo del día, los comentarios y rumores en el lugar revelaban la sorpresa sobre la escala que estaba tomando el incendio. Las conjeturas sobre su origen eran variadas, incluyendo la posibilidad de incendio provocado o de un sospechoso detenido, pero aún no había confirmación oficial al respecto.

Herminia, una residente local que volvía de vacaciones, coincidió con la opinión predominante que si bien los incendios son infrecuentes, normalmente se controlan rápidamente. Aunque el incendio había comenzado en las afueras y no parecía provenir hacia el centro de la ciudad, Herminia expresó temor por los linces ibéricos que habitan en el Parque Natural. A pesar de que este felino ya no está en peligro de extinción sigue siendo vulnerables.

La organización mundial de conservación WWF también expresó inquietud, destacando la importancia del área afectada para el lince ibérico. Según un comunicado de la organización, la zona alrededor del embalse atrae a una gran población de conejos, la principal fuente de alimento del lince.

«Aquí se encuentra el grupo de linces más importante de la Península», alegaron desde la WWF, proyectando que alrededor de 20 ejemplares podrían estar en peligro. Sin embargo, el representante de la Presidencia andaluza aseguró en una declaración reciente que los linces son «lo suficientemente inteligentes» como para «huir si detectan un incendio», y no había reportes de heridos entre la población de linces hasta el momento.

El domingo por la tarde, un devastador incendio en Andújar, al noroeste de Jaén, provocó una alarma de emergencia. Según los habitantes de la zona, este es el incendio más severo que han experimentado. El fuego comenzó cerca del embalse del Encinarejo, próximo a un Parque Natural. Durante las primeras 24 horas, el incendio consumió más de 700 hectáreas y obligó a casi 500 personas a abandonar sus hogares. Pese a que la zona afectada se halla a una distancia de más de 30 kilómetros del centro urbano, que cuenta con 35.000 habitantes, existen granjas, propiedades rurales y hoteles en el camino, que también alojan a residentes locales. Los bomberos han logrado estabilizar el incendio, pero aún no lo han controlado por completo.

Esta situación en Andújar, Jaén, ha llevado a la evacuación de entre 400 y 500 personas, debido al incendio que ha consumido más de 700 hectáreas de terreno, según EFE Europa Press.

Pese a que España cuenta con 600.000 datos para prevenir incendios, este distrito continúa sufriendo esta tragedia anualmente, según Marta Ley, Guillermo Cid, y otros colaboradores en una publicación de Fotografía de Emilio Fraile, Ana Ruiz, Luis Rodríguez, Sofía Sisqués y Emma Esser.

Paralelamente, se ha decretado el nivel 1 de peligro en un incendio en Villablino, León, de acuerdo a la información de Europa Press.

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