El adiestramiento de perros no se basa únicamente en impartir a nuestros caninos habilidades y trucos. En realidad, puede ser una actividad perfecta para pasar tiempo con nuestros amigos de cuatro patas, incentivando al mismo tiempo su ejercicio físico y fortaleciendo nuestro vínculo con ellos.
Sin embargo, conseguir que nuestros perros se sienten, nos pasen la pata o vengan a nosotros cuando los liberamos en el parque puede requerir cierta dedicación y esfuerzo. Puede ser desalentador si no tenemos claridad sobre cómo lograrlo.
Por este motivo, es útil repasar algunos conceptos fundamentales y sugerencias sobre cómo debemos entrenar a nuestros perros en trucos y habilidades, y detallar, paso a paso, cómo lograr que nos den la pata, uno de los trucos más simples y populares de enseñar.
Todo lo que necesitamos considerar antes de comenzar el entrenamiento.
El éxito en la enseñanza de nuevas habilidades a nuestro amigo canino dependerá de varios factores, entre ellos su edad, el lugar de entrenamiento seleccionado, el tiempo que ha estado con nosotros, etc.
Por ejemplo, sería aconsejable evitar el aprendizaje de nuevos trucos en sitios donde existan numerosas distracciones, como un parque, ya que es posible que no se centren en nosotros. En este contexto, sería más apropiado entrenarlos en casa, ya sea en la sala de estar o en el jardín, si contamos con uno.
Igualmente, es importante entender que obtendremos mejores resultados con un enfoque de educación positiva que consiste en recompensar cada vez que realicen correctamente lo solicitado mediante un refuerzo positivo, como comida (que debe ser nuestro primer recurso, dado que es una gran motivación para ellos), cariños, palabras de aliento, etc.
Para concluir, es crucial comprender que se necesita paciencia y comprensión para enseñar cualquier truco o instrucción a nuestro amigo de cuatro patas. No debemos disgustarnos o apenarnos si nuestro perro no lo logra en las primeras pruebas. La obediencia es algo que practicamos para disfrutar, fortalecer nuestra relación con nuestro canino y, al mismo tiempo, tener un perro más civilizado.
Los cinco procedimientos para que nuestro perro nos brinde su pata.
Los pasos para enseñarle este truco a nuestros amigos caninos siempre son los mismos, pero debemos considerar la edad de nuestro perro al planificar las sesiones. ¿Qué significa eso? Que un cachorro, a pesar de tener mucha energía y predisposición para aprender, tiene una menor capacidad para concentrarse que un perro adulto, por lo que nuestras sesiones deben limitarse a unos pocos minutos al día (mientras con los adultos podemos dedicar entre 15-20 minutos cada día).
Con eso dicho, revisamos los cinco pasos para lograr que nuestro perro nos dé su pata:
– Primer paso. Nos ponemos frente a nuestro perro sosteniendo en la mano una golosina que le agrade para asegurarnos de que la vea.
– Segundo paso. Si ya sabe cómo sentarse, se lo pediremos (y si no, solo debemos llevar nuestra mano hacia su cabeza y deslizarla por encima, ya que esto hará que se siente para continuar viendo la golosina que tenemos).
– Tercer paso. Una vez esté sentado, ponemos nuestro puño, con la golosina dentro, delante de su nariz y esperamos a que intente obtenerla (probablemente con alguna mordida o lamida que debemos ignorar).
– Cuarto paso. Al notar que sus esfuerzos no dan resultados, soon llegará un momento en que levantará una pata para intentar obtener el premio. En ese momento debemos felicitarle y entregarle la golosina.
Continuaremos practicando este ejercicio a lo largo del día y, una vez que nuestra mascota canina nos dé la pata de forma instintiva, podemos vincular la acción con el comando «patita», o cualquier instrucción verbal que prefiramos. ¿Simple, no es así? Sólo queda implementar la teoría en la realidad y lograr que nuestro can nos extienda su pata, además de adquirir muchos más trucos y destrezas. Comentarios.