Una excelente estrategia para las vacaciones puede ser explorar los pueblos encantadores de nuestro propio país. En este sentido, el norte de España, específicamente Asturias, ofrece una variedad de lugares interesantes como Ribadesella, Cudillero, Taramundi, Luanco, Tazones, entre otros. Hay un sinfín de destinos rurales para descubrir.
Queremos destacar un pueblo en particular que será un deleite para los aficionados a la gastronomía: Castropol. Este tranquilo pueblo asturiano no solo es conocido por su atractivo ambiente marítimo, sino también por tener las ostras más sabrosas de España.
Sin duda, no hay mejor lugar para disfrutarlas que en la localidad donde se cultivan.
¿Qué se puede hacer y visitar en Castropol?
No cabe duda de que Asturias ofrece una gran cantidad de actividades para hacer durante las vacaciones y Castropol es un brillante ejemplo de ello: desde disfrutar de su ría y mar, hasta ascender a la montaña. Además, no se puede olvidar la deliciosa gastronomía local basada en pescado fresco y, por supuesto, las exquisitas ostras de la ría del Eo.
Al situarse entre un impresionante entorno natural, una de las delicias al visitar este pintoresco pueblo es perderse en su histórico centro y explorar sus estrechos y adoquinados callejones, que evocan la herencia de la arquitectura tradicional asturiana. Pasear por estas calles te llevará a majestuosos ejemplos de construcciones indiana como el antiguo Casino de principios del siglo XX, y casas-palacio como el Palacio del Marqués de Santa Cruz (siglo XVII) y el Palacio de las Cuatro Torres (siglo XVIII).
Contemplar el pueblo desde los miradores
Asturias, con su belleza imponente, siempre nos regala vistas inolvidables sin importar desde donde la miremos. Te sugerimos visitar el Mirador de la Mirandilla, desde donde podrás apreciar la deslumbrante vista de la ría del Eo y de la pintoresca localidad de Ribadeo en Galicia al otro extremo del estuario. Este mirador se ubica en la parte superior de la villa, junto a la iglesia de Santiago Apóstol, un hito del casco antiguo. Pero este no es el único lugar para encantarte con el panorama, también tienes la opción del Mirador del Pico de la Vela y del Mirador del Capricho que te brindan maravillosas perspectivas del Cantábrico.
Un refugio de paz
Si necesitas recargar energías, la ría sirve como un espacio ideal para disfrutar de un placentero paseo en kayak o bote. Aquí, podrás admirar uno de los estuarios más bellos y coloridos de España, su flora y fauna, además de presenciar la cría de ostras.
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