Ya conocemos que el calor puede ser un enemigo para los vehículos. Durante la temporada de verano en España, que se caracteriza por ser la más calurosa, se han observado picos de temperatura récord en diversas partes del país. Durante el último año, hubo un incremento del 30% en las visitas a talleres de reparación por parte de los conductores en comparación con el mismo periodo en 2022.
Se ha confirmado que ciertos componentes del coche tienden a ser más afectados por el calor que otros y, por ende, podemos identificar las fallas más recurrentes durante el verano que llevan a las personas a buscar asistencia mecánica.
Desde Norauto, nos proporcionan la siguiente lista de los problemas más comunes durante el verano:
– La batería: El ácido interno de la batería se evapora con mayor rapidez, lo que acelera su fallo, especialmente si está cerca del final de su vida útil.
Esta pieza es especialmente sensible a cambios bruscos de temperatura, sufriendo tanto con el frio como con el calor.
– El alternador: Este componente es particularmente sensible al calor y provoca un alto número de visitas al taller.
– El líquido refrigerante: Este líquido previene el sobrecalentamiento del motor y es crucial que funcione adecuadamente para prevenir problemas serios que puedan ser causados por altas temperaturas.
– Los neumáticos: Con el calor, los riesgos de reventones, pinchazos y desgaste prematuro se incrementan. Es importante verificar la presión de los neumáticos y asegurarse de que no muestran deformaciones antes de un viaje.
– Otros componentes: El tapizado, el tablero, las escobillas, las ópticas, las bandas de goma y las juntas también son partes del carro que se ven afectadas por el calor. Revisar estos elementos también es crucial para prevenir desgastes prematuros.
