Tamara Falcó e Íñigo Onieva se encuentran en unas vacaciones exóticas en las bellas islas Seychelles, donde hacen uso de una experiencia de lujo sin precedentes. A pesar de ello, los marqueses de Griñón aún recurren a tácticas para economizar durante sus viajes.
Estuvieron a punto de no llegar al avión, dado que Falcó, ya estando en España, recordó que su equipaje estaba aún en casa. Dio aviso a su residencia y se organizó para que se le entregara la maleta olvidada en el aeropuerto.
Esta demora para reunir todo su equipaje casi hace que el avión partiera sin ellos a bordo.
Falcó compartió la secuencia de eventos en el aeropuerto con sus seguidores, indicando que «En la última instancia, tuvimos que pedir a alguien de la casa que trajera una maleta que había olvidado y entonces llegamos corriendo, literalmente, al avión. Pero bueno, divina prudencia».
Los marqueses tomaron un vuelo en una aerolínea elitista y sofisticada que Falcó ha promovido en su cuenta de Instagram, donde tiene más de 1,6 millones de seguidores. Sin embargo, compartió una técnica indiscutible para asegurarse de tener algo sabroso y barato para comer: traer tus propios sándwiches caseros.
Durante el vuelo, Onieva dejó a la marquesa atónita al sacar más de seis sándwiches de jamón de su equipaje. Señaló que era «un vuelo muy largo». Tamara Falcó añadió a la publicación, «No sin mis sándwiches de jamón». De esta manera, la pareja se ahorraría en comida en el avión, a pesar de estar a punto de comenzar unas vacaciones indudablemente lujosas que no están al alcance de todos.
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