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España se baña en oro gracias a Jordan Díaz y ‘la Rojita’

En breve (el 30 de agosto), la escritora Camilla Läckberg cumplirá 50 años. Casi la mitad de su vida ha entregado a la literatura, acumulando una cuantiosa base de seguidores, para llegar a la imponente cifra de 35 millones de lectores en todo el mundo, dos millones de los cuales se encuentran en España.

Su obra más reciente es «El espejismo» (Planeta), la tercera parte de una trilogía en la que ha colaborado con el mentalista Henrik Fexeus, y que sigue a «El mentalista» y «La secta».

Han sido su más reciente novela y su participación en el congreso de liderazgo femenino Santander WomenNow, lo que la ha traído nuevamente a territorio español, un país al que ama fervientemente, e incluso ha adquirido una residencia en España, con la intención de cambiar los grises inviernos suecos por el radiante sol español.

Las historias de Camilla son muy apreciadas entre el público español, al grado de que relata cómo un fanático se tatuó su nombre en el cuello. A pesar de su irónico sentido del humor, no está bromeando cuando asegura que ninguno de sus cuatro hijos ha leído alguna de sus obras. Incluso ha expresado, en tono de broma, que considera desheredarlos si continúan sin hacerlo.

¿Cuántas visitas ha hecho a España? ¿Cómo es su recepción por parte de los seguidores aquí? No puedo recordar cuántas veces he visitado España ya que he perdido la cuenta. Inclusive, tengo una propiedad en Altea, Alicante, donde residí desde el mes de julio. Mi vínculo con España es bastante especial, dado que fue uno de los primeros lugares donde mis novelas recibieron admiración. Este afecto único lo mantengo con gran cariño. Adicionalmente, un lector en España decidió tatuarse mi nombre en su cuello, algo que ni mi propio esposo ha hecho. Esto es una demostración notable de devoción. Para una autora como yo, es una experiencia maravillosa recibir tanto cariño en un país extranjero. He bautizado mi casa en Altea como «La casa de papel» por dos razones: la primera, nuestra admiración por la serie televisiva, y la segunda, creo que es un gesto simbólico hermoso, dado que la posibilidad de adquirir dicha propiedad se deriva de la vida que he construido gracias a los libros.

Actualmente, ¿habla español? (Responde en español al principio) Un poco, muy poco. (Luego cambia al inglés) Necesito aprender más. Mi esposo esta estudiando español y mis hijos leen en este idioma. Incluso mi hijo de 15 años realizó un programa de estudios en Málaga durante tres semanas. Adicionalmente, veo más series en español ya que en Suecia no doblamos las películas y series. Creo que es beneficioso que no sea así.

¿Cómo se siente al ser llamada ‘fenómeno’ debido a sus 35 millones de seguidores? ¿Cómo afecta esto a una persona común y corriente? Es un poco complicado para mí identificarme con ese término. Mi rutina diaria es de una persona totalmente ordinaria. A parte de ser escritora, soy mamá de cuatro hijos. Son escasos los momentos en los que comprendo por qué a veces puedo ser descrita como un fenómeno.

En Fjälbacka, la ciudad de donde provengo, actualmente contamos con entre 10 y 12 guías turísticos que ofrecen diversos recorridos para descubrir los sitios que menciono en mis novelas. La gente de todos los rincones del mundo viene a conocer los lugares que sirven de escenario en mis libros, es extraño pero gratificante a la vez. A pesar de ser una localidad pequeña, Fjälbacka tiene un gran sentido de orgullo y es conocida a nivel internacional. Me hace mucha gracia que una vez decidí participar de uno de estos tours, sin revelar mi identidad, en compañía de dos damas australianas. Había acordado con el guía preguntar cosas absurdas sobre mi persona, Camilla Läckberg. al final del recorrido, al llegar a la casa de mi madre, las señoras me reconocieron al ver mis fotos en la casa. Fue una aventura peculiar y entretenida.

El fallecimiento de un líder político, los temas vinculados a la política… ¿Acaso no evocan de alguna forma el misterioso asesinato de Olof Palme, el ex primer ministro? Es un capítulo de nuestra historia que ha quedado impreso en la memoria de todos los suecos. Yo era muy joven en aquel entonces, tendría unos seis o siete años, pero recuerdo vívidamente esa mañana: casi todos dormíamos, a excepción de mi padre que estaba observando las noticias. Inesperadamente llegó rápidamente gritando «han tiroteado a Olof Palmer, está herido». Eso modificó nuestro país. Recientemente he desarrollado mayor consciencia política, especialmente teniendo en vista lo que está sucediendo en Europa, Estados Unidos y en Suecia. Enfrentamos un problema de racismo, tenemos un partido político racista que se está fortaleciendo cada día más. Esto es completamente contrario a mis convicciones, por lo que he decidido incorporar más este tema en mis escritos.
¿Existen más vidas literarias para Vicent y Mina, los protagonistas de tu última tetralogía? Por ahora, no planeamos más libros que incluyan a estos personajes. Sin embargo, siempre he sabido que nunca se debe decir ‘nunca’. Es posible que en el futuro estos personajes regresen, pero quizá de una forma distinta. Actualmente estamos llevando a cabo unas conversaciones privadas con Henrik. Hemos llegado al punto de acordar que si Vincent y Mina nos buscan y nos dicen que tienen más historias que compartir, podríamos considerarlo.
A mis hijos no les interesa lo que hago. Afirman que si escribiera sobre Pokemon o fantasía… pero crímenes, no les atraen.

Las tramas de Camilla Läckberg resaltan la importancia de la familia, normalmente complicada y plagada de relaciones enigmáticas. La influencia de su propia familia en su obra es innegable y poderosa. Siempre ha sentido una fascinación particular por las dinámicas familiares disfuncionales, más que por los estragos del terrorismo o la violencia urbana. A pesar de que su propia familia es bastante estable, no ha quedado exenta de influencias. Un ejemplo de ello es que se convirtió en madre por primera vez justo cuando su primer libro fue publicado. Estos dos eventos importantes ocurrieron simultáneamente. Sus libros también suelen abordar temas como niños asesinados, abusados ​​o lastimados. Escribe sobre estos temas como una forma de liberar sus propios temores y ansiedades maternales, utilizando la escritura como terapia.

No obstante, de sus cuatro hijos, ninguno se ha mostrado interesado en la escritura, a menos que esté relacionada con Pokémon o la fantasía, no se sienten atraídos por su escritura. De hecho, ninguno ha leído sus libros. Ante su indiferencia, incluso ha bromeado con desheredarlos si no se animan a leer sus obras.

Finalmente, confesó sentirse algo avergonzada cuando le preguntan acerca de si lee autores españoles, ya que en su país, Suecia, hay una preferencia por los escritos anglófonos.

¿En qué tipo de ‘ilusión’ se ha encontrado Camilla? ¿Una percepción falsa o engañosa? Por suerte, aún no ha ocurrido. Me considero afortunada ya que los proyectos que he iniciado en su mayoría han llegado a buen término. Sin duda, soy persistente pero también muy diligente. Por tal motivo, he alcanzado el éxito. Por supuesto, aún tengo muchos sueños por cumplir.

¿Tiene interés en autores españoles que escriben en su género literario? Debo admitir que a veces evito este tipo de preguntas porque la respuesta refleja una limitación que tenemos en Suecia. Nuestra tradición y cultura literaria se alimentan de la literatura anglosajona. Por ello, los libros que leemos frecuentemente son de autores de Gran Bretaña o Estados Unidos. Sin embargo, dado que ahora poseo una casa en España, tengo el deseo de adentrarme en la literatura española. He comenzado a ver series españolas y documentales del género ‘verdadero crimen’.

En Altea, inicié la redacción del duodécimo volumen de las historias de Fjälbacka.

¿En qué está trabajando actualmente la autora Camilla Läckberg? Durante este verano, comencé a redactar el duodécimo volumen de las historias de Fjälbacka. Ese fue mi plan para el verano. En Altea, mientras sorteo las pelotas de golf, me dedico a escribir. Tal vez necesite usar un casco mientras escribo, eso sería divertido (ella rie).

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