El pastor mallorquín, también llamado ca de bestiar, es una especie de perro español con un legado multisecular que ha moldeado una raza distinguida por su coraje, amabilidad y habilidades para cuidar ovejas. Los expertos están de acuerdo en que el ca de bestiar moderno es un descendiente de los perros alanos con influencias de otras razas que proporcionaron características variadas.
El pastor mallorquín ha sido una ayuda crucial para los habitantes de Mallorca en la protección de diversas especies animales, desde aves hasta cerdos y vacas. Sin embargo, su labor más querida siempre ha sido el cuidado de cabras y ovejas.
Además, se utilizaba para proteger hogares y propiedades, y como apoyo para los ‘garriguers’, personas encargadas de vigilancia de recursos valiosos como caza y madera.
El progreso del pastor mallorquín
La llegada de los ancestros del ca de bestiar a Mallorca no está confirmada, aunque algunas teorías sugieren que podrían haber llegado con la conquista del rey Jaime I de Aragón en 1229, cuando las Islas Baleares fueron liberadas del dominio musulmán. Es probable que las tropas del rey llevaran perros alanos para realizar tarea diversas, y aquellos que se establecían en la isla llevaban sus perros para usos agrícolas, ganaderos y para proteger sus propiedades.
Sin importar la fecha real de su llegada, parece que los perros alanos se mezclaron con los perros mallorquines locales, generando una raza de perros más pequeña, más habilidades pastoriles y más resistente físicamente. Este trabajo de pastoreo a través de siglos fue clave para el desarrollo de la raza, dándole características morfológicas particulares que la distinguen del resto de las razas de perros de las Islas Baleares.
Cuando los primeros visitantes llegaron a la isla, trajeron consigo diferentes razas de perros como el pastor alemán. La mezcla con la raza local fue tan intensa que la última estuvo al borde de la extinción. En respuesta a esta problemática, un grupo de entusiastas de los perros implementó un programa de cría planificado en los años 70, fundando el primer club de la raza que opera hasta hoy. En 1980 se publicó el primer patrón de la raza, obteniendo finalmente su reconocimiento por la Federación Cinológica Internacional.
Respecto a su comportamiento y características, el Ca de bestiar es un perro robusto, ágil y bien proporcionado, con un pelaje suave y fino. El color predominante es el negro, aunque una mancha blanca en forma de corbata en el cuello es admitida. Existes dos variantes de pelaje: el corto, que es el más común, y el semi-largo.
Son perros conocidos por su alta capacidad de aprendizaje y su fuerte instinto de pastoreo. Los especialistas y criadores sostienen que son perros que pueden ser tímidos y reservados con desconocidos pero extremadamente leales a su dueño. Los pastores valoran y siguen valorando al pastor mallorquín por su responsabilidad, iniciativa y autonomía – atributos que los hacen aptos para diversas tareas y deportes caninos. En el hogar, son perros tolerantes con los niños, sin embargo, pueden mostrarse dominantes con otros perros del mismo sexo, lo que puede generar conflictos si no cuentan con una socialización adecuada.
Si buscas un perro trabajador y estás dispuesto a crear un fuerte vínculo con él, el Ca de bestiar puede ser una excelente opción. Sin embargo, debido a su naturaleza reservada y tímida con los extraños, puede que no sea la mejor opción para familias que desean un perro que se integre fácilmente con todos.
Conforme a los datos de la Federación Cinológica Internacional, la emotividad del pastor mallorquín puede alcanzar niveles inimaginables. Para ganar su cariño, es esencial tratar al animal con respeto, tener un excelente entendimiento del lenguaje canino y destinar una cantidad significativa de tiempo para cumplir con sus necesidades de ejercicio.
Para obtener más detalles, es aconsejable comunicarse con el Club Nacional del Pastor Mallorquín o con el Club del Ca de Bestiar. Ambas instituciones colaborativas son reconocidas por la Real Sociedad Canina de España.
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