Indiscutiblemente, España se destaca como una de las naciones con la mayor producción y demanda de frutos. Sin embargo, a pesar de nuestra aparente familiaridad con estos, persisten interrogantes en torno a su sabor, origen y apariencia entre los consumidores.
Tal es el caso de la misteriosa capa de polvo blanco que a menudo cubre ciruelas, arándanos y uvas. La nutricionista Boticaria García, ha tomado la iniciativa de esclarecer esta duda a través de sus redes sociales.
¿Cuál es la naturaleza del polvo blanco presente en la superficie de la ciruela?
Es común que las personas confundan esta filmación blanca con suciedad y, consecuentemente, laven la fruta.
Sin embargo, Garcia ha confirmado que no está asociado con la suciedad. Es, en efecto, la pruina o claudy bloom, una cera natural que la fruta produce como mecanismo de protección. Garcia describe la pruina como una «triple amenaza», ya que funciona como defensa contra insectos, radiación UV y exceso de agua. Este recubrimiento evita la acumulación de agua y mantiene el interior jugoso de la ciruela intacto, asegurando que la fruta no se dañe debido a la humedad excesiva.
Además, esta barrera protege al fruto de patógenos y hongos que pueden dañarlo. Por último, su existencia dificulta la penetración de los dañinos rayos UV a través de la piel del fruto. La presencia de esta capa es indicativa de un buen trato a la fruta y, por ende, confirma que la ciruela está fresca y en óptimas condiciones.
¿Debemos lavar las ciruelas?
Lavar los frutos es una decisión personal, sin embargo, se recomienda hacerlo, en particular para las ciruelas. El acto de lavar las ciruelas no tiene ninguna implicancia negativa en su consumo humano, incluso si llevan pruina. Al estar expuestas en supermercados y tiendas de frutas, es más seguro lavarlas justo antes de ingerirlas.
¿Cómo seleccionar y conservar las ciruelas de la mejor manera?
La explicación de Boticaria García ayuda a entender que las ciruelas con pruina son las óptimas para elegir. Evita las ciruelas que están dañadas o tienen una piel demasiado lisa sin un matiz blanco. Adicionalmente, la duración y frescura de las ciruelas será determinada por cómo las conserves. Para mantener su frescura, se sugiere guardarlas en la nevera. Si bien la pruina mantendrá la humedad de la fruta, mantenerlas en un lugar frío extenderá su frescura aún más. Puedes sacarlas unas horas antes de comerlas si prefieres disfrutarlas a temperatura ambiente.
Beneficios de salud de las ciruelas
Las ciruelas son una rica fuente de nutrientes esenciales con múltiples beneficios para la salud. Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), las ciruelas consisten en agua (86.3%), hidratos de carbono (11%) y fibra (2.1%). Son ricas en vitaminas C, K, A y varias del grupo B, además de minerales como potasio y magnesio. Estos nutrientes contribuyen a reforzar el sistema inmunológico, mejoran la digestión debido a su alto contenido de fibra, y ayudan a mantener la salud ósea.
Poseen una gran capacidad para luchar contra los radicales libres debido a su propiedad antioxidante, lo que disminuye la posibilidad de padecer enfermedades crónicas y envejecimiento temprano. Además, son aptas para individuos que padecen de diabetes por su bajo nivel de azúcares. El potasio que albergan favorece la regulación de la presión sanguínea, beneficiando la salud del corazón.
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