Después de la trascendental proceder de los Juegos Olímpicos de París 2024, Francia introdujo a los 10.500 atletas globales con un desfile acuático en el río Sena. El corazón de París fue invadido por un aluvión de color en un evento donde casi 400 atletas españoles hicieron acto de presencia.
En esta XXXIII edición de los Juegos Olímpicos, España encomendó su emblema al canoísta Marcus Cooper Walz y a la regatista Támara Echegoyen que, junto al resto de la delegación española, llevarán el estandarte español. Esta decisión sorprendió a muchos seguidores olímpicos que esperaban que la jugadora de bádminton, Carolina Marín, llevara la bandera.
Pero fue la propia Carolina quien rechazó la oferta, ya que prefería evitar permanecer despierta hasta altas horas de la madrugada y quería estar totalmente concentrada para su debut al día siguiente.
Carolina Marín tuvo un debut increíble en los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro en 2016. En la competencia individual, se convirtió en un ícono del bádminton en España y ganó una medalla de oro que se colgó orgullosamente. Sin embargo, no pudo participar en los Juegos de Tokio 2020 debido a una lesión en la rodilla izquierda.
En lo que respecta al Campeonato Mundial de Bádminton entre 2014 y 2023, Marín ha obtenido un total de cuatro medallas, tres doradas y una plateada. En el Campeonato Europeo de Bádminton entre 2014 y 2024, ha logrado siete medallas, todas doradas. También ganó una medalla de oro en los Juegos Europeos de Cracovia 2023. Además, Marín ha ganado siete Super Series Premier.
Siguiendo su destacada carrera en el deporte, Carolina Marín recibió en 2014 el reconocimiento del Premio Nacional del Deporte Reina Sofía como la mejor deportista del año. Ese mismo año, también fue homenajeada con la Medalla de Bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo. En 2016, recibió la Medalla de Oro de la misma orden, y en 2018, fue condecorada con la Medalla de Andalucía. Finalmente, en 2024, se le otorgó el Premio Princesa de Asturias de los Deportes.
La vida privada de Carolina Marín
A la sombra de su grandioso éxito deportivo, Carolina Marín es una mujer de 31 años, originaria de Huelva, quien en su adolescencia tuvo que abandonar su tierra natal para establecerse en Madrid y convertirse en la mejor jugadora de bádminton del mundo. Consciente de que el bádminton es un deporte menos popular en España, la atleta decidió expandir su educación y estudiar Fisioterapia y Dietética y Nutrición.
A pesar de la fama, esta no ha sido un obstáculo para Carolina Marín, quien ha tenido siempre el respaldo de su familia y amigos. También comparte una relación cariñosa con su pareja, Gen Esteban San Millán, un joven atleta miembro del equipo de atletismo de la Real Sociedad, ganador de múltiples medallas.
Pese a su felicidad en pareja, ambos prefieren mantener un bajo perfil con respecto a su vida personal en las redes sociales, evitando compartir detalles íntimos de su relación. Como dato interesante, Marín es activa en la plataforma TikTok, donde a menudo comparte vídeos suyos bailando los éxitos del momento o siguiendo las últimas tendencias.
