Un joven es detenido por las autoridades como presunto autor de la muerte de un canónigo de la catedral de Valencia por asfixia.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en la tarde ayer 24 de enero; a un joven como principal sospechoso de la muerte del canónigo emérito de la catedral de Valencia, Alfonso López Benito, de 80 años.
El sacerdote fue hallado sin vida en su domicilio, con evidentes signos de haber sido asfixiado.
Según la Policía, el cuerpo del canónigo fue descubierto el martes en la cama de su dormitorio por un amigo que acudió a su vivienda al tener una cita prevista con él.
El fallecimiento del sacerdote presentaba circunstancias inusuales.
El portero del edificio, sorprendido por la visita, mencionó que había recibido un mensaje del canónigo informando que se ausentaría varios días de su domicilio.
Ante la falta de respuesta a las llamadas, el portero utilizó su llave para acceder al piso, encontrando así el cadáver.
Las investigaciones preliminares apuntan a que la muerte ocurrió días antes.
Posiblemente el día sábado o el domingo; aunque el teléfono del sacerdote fue utilizado con posterioridad.
El Grupo de Homicidios de la Policía se hizo cargo de la investigación tras observar indicios de un crimen.
Siguiendo la pista del teléfono móvil del canónigo, los investigadores se centraron en el entorno más próximo del sacerdote.
Según informó el diario Levante EMV, el joven detenido era un habitual en la casa del fallecido.
Vecinos del edificio revelaron que el sacerdote acostumbraba a llevar a su hogar a jóvenes vulnerables y en ocasiones; estos habían causado incidentes en el edificio.
También se consideró la posibilidad de que el autor del crimen fuera alguien cercano al canónigo, con conocimiento de sus hábitos y una posible relación íntima.
No se encontraron señales de que la puerta del domicilio hubiera sido forzada y la casa estaba en orden.
Se sabe que el canónigo ayudaba a personas con problemas de drogadicción o de salud mental.
El pitbull de grandes dimensiones que ha acabado con la vida de su dueño de 26 años será presumiblemente sacrificado tras lo sucedido.
El presunto asesino en serie queda con los hombres a través de apps de citas y posteriormente los droga para robarles en Bilbao.