Ambas españolas detenidas han llegado a España desde campos de refugiados de Siria y están a la espera de declarar por hacer la yihad.
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Detenidas dos españolas que fueron a Siria a hacer la Yihad. Son Yolanda Martínez y Luna Fernández, que han llegado a España con sus 13 hijos menores y que están bajo custodia policial. Todo ello a la espera de declarar por un delito de terrorismo yihadista.
Detenidas dos españolas que fueron a Siria a hacer la Yihad
Tenían varios menores a su cargo y estaban casadas con yihadistas. Ambas han llegado a España desde campos de refugiados de Siria. Son Yolanda Martínez y Luna Fernández, que han llegado a España con sus 13 hijos menores y que están bajo custodia policial a la espera de pasar a disposición de la Audiencia Nacional.
Ambas tendrán que comparecer ante la justicia por un delito de terrorismo yihadista. Hay una tercera mujer de un yihadista que no ha podido ser localizada y que, por tanto, no ha sido retornada por las autoridades españolas.
La repatriación de ambas mujeres comenzó dos años y medio atrás
La repatriación de ambas mujeres comenzó dos años y medio atrás. Entonces localizaron a estas dos españolas en un campamento de refugiados de Siria, en la frontera con Turquía. Tras una entrevistada por el CNI, firmaron para retornar a España para ser juzgadas. Ese pacto lo mantuvieron en secreto durante mucho tiempo porque sus vidas corrían peligro, ya que los terroristas podían considerarlas como traidoras. De hecho, hace apenas unos meses asesinaron a dos mujeres suecas en ese mismo campamento por ese motivo.
Otro de los problemas que se presentaron fue que Turquía estuvo bombardeando esa zona en los últimos tiempos, por lo que no se pudo adelantar el traslado de ambas mujeres. Incluso España hizo una petición a EEUU para que pidiera a Turquía el cese de los ataques. Además, varios países de oriente medio se ofrecieron como territorio para hacer escala en el traslado a España.
Niños muy pequeños criados en ambientes muy violentos
El principal problema que tenían era la radicalización extrema de las mujeres. Esto provocó que en las negociaciones entre Interior y Exteriores hubiera reticencias a su repatriación. Lo que más preocupa a las autoridades españolas son los menores: se trata de niños muy pequeños criados en ambientes muy violentos y que han presenciado situaciones de todo tipo. Ninguno de ellos sabe hablar español y preocupa especialmente uno de ellos, de 15 años y que vivía en el campamento de hombres, por su intensa radicalización.