La policía Nacional ha alertado de la técnica que están empleando los ladrones, para saber si las casa están vacías y así entrar a robar.
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La Policía Nacional ha hallado en los últimos meses, un nuevo método para robar en las casas. Por ello, ha querido ponerlo en conocimiento de todos los ciudadanos mediante sus redes sociales oficiales, y así alertar de la técnica que emplean los ladrones en las viviendas que se encuentran vacías.
El nuevo método para robar en las casas
Los ladrones no dejan de crear técnicas con las que seguir con su labor criminal. En los últimos tiempos han sido capaces de desarrollar un nuevo mecanismo que les permite saber si la residencia que pretender entrar a robar se encuentra o no completamente vacía.
El nuevo método consiste en el empleo de un hilo invisible, el cual está formado de silicona convirtiéndose así en casi invisible para el ojo humano. Este lo colocan en una de las zonas menos visibles de la puerta, en concreto en el marco.
Si hay gente en la casa, el hilo se extiende al abrir la puerta y se rompe, lo que informa a los ladrones de que hay inquilinos y no es el momento de entrar a robar. Mientras que si cuando van a comprobar el estado del hilo, ven que continúa intacto, saben en ese momento que la casa está totalmente vacía y pueden acceder a ella sin problemas.
El último método para robar en las casas
La recomendación de las autoridades, es que las casas cuenten con puertas blindadas o que estas cuenten con dos puntos de cierre. Además, animan a la gente a que presten atención a la puerta de su vivienda, por ejemplo con ayuda de algún familiar o vecino que la revise, en aquellos periodos de tiempo en la que la dejen deshabitada.
En los casos en los que los propios inquilinos se percaten de que hay indicios de un posible robo, les aconsejan llamar a su teléfono de contacto oficial.
¿Qué es el ‘Impresioning’?
Hace unos cuantos meses, la técnica que empleaban los ladrones era el conocido como ‘Impresioning’. Una método con el que se colocaban unas láminas hechas de aluminio deformable dentro de la cerradura de la puerta de la casa.
De esta manera, cuando la futura víctima quiere acceder a su vivienda, dichas láminas dejan grabada las marcas de la llave que se introduce en la cerradura y después sacan una copia. Así consiguen su propia llave para entrar a la casa sin dejar huella alguna de que ha sido algo forzado.
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