Los tres acusados por violar una joven en mayo de 2018, apodados la 'manada de Molins', han recibido una condena de 60 años de prisión en total.
Temas cubiertos
Los tres acusados por violar una joven en mayo de 2018, apodados la ‘manada de Molins’, han recibido una condena de 60 años de prisión en total.
Condena a la ‘manada’ de Molins
La Audiencia de Barcelona ha condenado a 20 años de prisión a 3 hombres que violaron a una joven en la localidad barcelonesa de Molins de Rei en el año 2018.
La sentencia condena a cada uno de los agresores por 3 delitos de agresión sexual (1 como autores y 2 como cooperadores necesarios) y les obliga a indemnizar a la víctima con 45.360 euros por daños morales y lesiones causadas.
Agresión sexual en 2018
Los hechos ocurrieron a la salida de una discoteca en torno a las 6:30 horas del 19 de mayo de 2018. Los tres condenados conocieron a la mujer dentro del local y la convencieron para que se marchara con ellos.
Una vez se fueron del local, le realizaron tocamientos, la agredieron, la vejaron y la violaron por turnos en un descampado mientras la mujer «gritaba e intentaba zafarse de los agresores». Además, la víctima había consumido alcohol y sustancias estupefacientes por lo que tenía «grave deterioro de sus funciones intelectivas y físicas» en el momento en que se subió al vehículo de los procesados, un aspecto del que se aprovecharon los condenados.
Se ha absuelto al acusado que grabó imágenes de la violación y las compartió en un grupo de WhatsApp porque no ha sido acreditado que las imágenes las vieran personas ajenas al chat.
Declaración «creíble» y «fiable»
La sentencia ratifica la declaración de la víctima y establece que su relato fue «creíble» y «fiable» y, a pesar de alguna manifestación más imprecisa por la «situación en la que se encontraba en el momento de los hechos», el tribunal considera su versión «veraz en aquello esencial».
Además, el relato de la joven ha quedado probado por las pruebas biológicas y los informes.
La sentencia considera probado que los condenados la llevaron a un lugar apartado para «satisfacer sus deseos libidinosos» y obligarla a realizar diferentes prácticas sexuales «de forma sucesiva».
Prisión para los acusados
se les ha impuesto una pena de 8 años por un delito de agresión sexual y dos penas de 6 años por delitos de cooperador necesario de un delito de agresión sexual.