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La Policía difunde la imagen de una etiqueta para intentar resolver un crimen sucedido en Madrid.
La Policía Nacional ha difundido la imagen de una etiqueta de un comercio de Madrid para intentar solucionar un crimen.
La etiqueta solo contiene datos que permiten localizar el establecimiento buscado. Solo aparece un nombre, ‘Super Bazar’, y el precio del producto marcado, 1.80 euros. La Policía, por el momento, no ha revelado más detalles el caso al que pertenece esta pista con el fin de evitar obstaculizar la investigación.
De esta forma, la Policía ha pedido colaboración ciudadana para localizar ese establecimiento, un dato que “podría ser clave en la investigación de un delito grave”, según explican en la red social Twitter en la que han hecho esta petición de ayuda.
De esta forma, la Policía evitainformar del caso al que corresponde esta pista. No quieren interferir en la investigación actual alertar a sus autores. Tampoco han querido concretar a qué tipo de delito hace referencia. Sin embargo, al ver la imagen y la información dada, inferimos que una petición así sólo es efectuada en delitos y crímenes de alta gravedad. De hecho, todo apunta a un homicidio o un asesinato.
La etiqueta es pequeña y su color es anaranjado. Además, presenta sus bordes redondeados. A simple vista, la prueba que ha emitido la Policía resulta demasiado genérica y utilizada en miles de establecimientos. Sin embargo, el tipo de letra empleado o los defectos en la impresión del precio pueden servir a los agentes de la Policía Científica para establecer un patrón. Este será el que les permita ubicar el establecimiento. Para ello piden que los ciudadanos aporten etiquetas similares.
El Cuerpo Nacional de Policía también difundió, en el año 2018, otra pista para resolver un crimen. En aquella ocasión la pista era la voz de una persona, a la que necesitaban identificar. Un hombre de 81 años había sido asesinado en Santander y esa persona a la que se buscaba era quien un día después llamó desde una cabina telefónica de Vitoria para informar de la muerte. Detuvieron al culpable gracias a las llamadas de ciudadanos anónimos.
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