Una nueva carta de Miguel Carcaño en la que culpa a su hermano de la muerte de Marta del Castillo ha sido aceptada por la Justicia.
Temas cubiertos
La Justicia ha decidido aceptar una carta escrita por Miguel Carcaño culpando a su hermano en el caso Marta del Castillo. El asesino confeso vuelve a dar la versión de 2013 y desea seguir «colaborando» en la investigación.
Justicia acepta una nueva carta de Miguel Carcaño
“Ya terminó hace muchos años el tiempo de mentir para encubrir a mi hermano«, comienza la carta dirigida a la abogada de la familia de Marta. “Estoy contento y esperanzado en que todo esto pueda servir para demostrar lo que realmente ocurrió aquella tarde-noche del 24 de enero y, lo que es aún más importante, el poder encontrar el cuerpo de Marta.
Yo sólo puedo relatar lo que realmente sé, del resto solamente mi hermano tiene las respuestas”, explica Carcaño.
Los hechos, según la carta de Miguel Carcaño
Según esta versión, Miguel Carcaño llegó a su casa, donde ocurrieron los hechos. Allí estaba su hermano Javier Delgado. Nada más llegar, empiezan a pelear por la hipoteca de la casa. Marta media entre los dos hermanos. “Mi hermano se da la vuelta y la golpea en la cabeza con la culata de una pistola. Cae al suelo, dentro de mi habitación, y yo me quedo en el pasillo, y mientras tanto mi hermano se va para el salón y allí realizó una llamada, que desconozco a quién y el contenido de la misma”, explica.
Vuelve la versión de 2013
Entonces Javier García Marín, el Cuco, vio el cuerpo sin vida de Marta y se echó «a correr y se fue de la casa”, según la versión de Carcaño. Los dos hermanos emplearon una silla de ruedas para sacar el cuerpo del piso y lo llevaron hasta una finca.
Sobre la hora de su muerte también ha escrito. “Lo único que sé es la hora de llegada a mi domicilio de León XIII, con Marta, alrededor de las 20:30 horas, y mi llegada a Camas sobre las 23:00 horas”. Tampoco puede precisar la distancia que media entre la carretera hasta la “zanja” donde depositaron el cuerpo, y lo que sí reitera es que al día siguiente, el 25 de enero, él y su hermano regresaron en el coche a la zona donde dejaron el cuerpo.
“Desde entonces, no sé nada más de su paradero. No hay nada distinto a lo ya declarado en el año 2013”, explica.
