Ha sucedido en la cárcel de Quatre Camins, en Barcelona. El preso seccionó parte del pulgar de la mano izquierda del funcionario.
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Un preso arranca de un mordisco el dedo a un funcionario en una cárcel de Barcelona. Le seccionó con un bocado parte del pulgar de la mano izquierda. El funcionario le estaba trasladando de celda, y, aunque llevaba guantes protectores, fueron más fuertes los dientes del preso.
Un preso le arranca el dedo a un funcionario en Barcelona
Un preso de la cárcel Quatre Camins en Barcelona ha arrancado de un mordisco la punta del pulgar de la mano izquierda a un funcionario al que agredió cuando este le trasladaba de celda.
Según Justicia, el funcionario llevaba guantes protectores en el acto.
Los sindicatos CSIF, UGT y CCOO han denunciado lo que han confirmado fuentes de la Conselleria de Justicia: la agresión se produjo hacia las 16.45 de este martes 23 de noviembre. Sucedió cuando el interno, clasificado en primer grado, agredió a tres funcionarios que le trasladaban de celda. A uno de los tres funcionarios le arrancó la punta de un dedo.
El dedo que le arrancó el preso de Barcelona fue con un mordisco
El preso cumple actualmente una condena de prisión de dos años. A finales de octubre le trasladaron a las dependencias del departamento especial de régimen cerrado del centro penitenciario de Quatre Camins, en La Roca del Vallès, en Barcelona. El motivo fue que agredió a otro interno.
Cuando los funcionarios le trasladaban este martes 23 de noviembre a otra celda, el interno cargó en su contra y le arrancó de un mordisco la punta del pulgar de la mano izquierda. Además, causó lesiones leves a los otros dos. Los tres funcionarios agredidos decidieron pedir refuerzos con el fin de poder reducir al interno.
El preso le seccionó parte del pulgar al funcionario
Instituciones Penitenciarias ha abierto una información reservada al interno y le denunciará ante el juzgado de guardia por dicha agresión al funcionario. A este lo atendieron en un primer momento los servicios médicos de la cárcel. Después lo trasladaron a la mutua.
El sindicato CSIF ha denunciado que esta agresión fue evitable y así podría haber sido «si los responsables del centro hubieran tomado las medidas de seguridad oportunas para frenar las continuas muestras de violencia de este interno y otros”. El recuerdo de que el pasado mes de octubre, este mismo preso le arrancó la oreja a otro preso debería haber servido.