La lava del volcán baja por el sur y está a 600 metros del cementerio de Los Llanos de Aridane. Hay 3.000 personas enterradas en los 5.800 nichos.
Temas cubiertos
- El cementerio rodeado por la lava del volcán La Palma
- Los reclamos de los familiares para salvar los restos de sus seres queridos en el cementerio ante la lava del volcán La Palma
- Las párrocos preocupados por realizar los oficios al aire libre: no se puede en el cementerio por culpa de la lava del volcán La Palma
Las coladas del volcán Cumbre Vieja de La Palma se acerca peligrosamente a escasos 600 metros del cementerio de Las Manchas en Los Llanos de Aridane. Los vecinos temen que desaparezca bajo el magma y con él sus recuerdos, sus seres queridos, su pasado, junto al único crematorio de la isla.
El cementerio rodeado por la lava del volcán La Palma
La emergencia que provoca la lava obliga a la gente a no poder acercarse durante el Día de Todos los Santos, el próximo 1 de noviembre, con el cementerio ubicado en una zona de exclusión.
Las parroquias del valle ya se están movilizando para que al menos exista para ellos «un rincón de la memoria».
El cementerio en Los Llanos posee unos 1.000 metros cuadrados y en donde hay aproximadamente 3.000 personas enterradas en los 5.800 nichos. «Desde las autoridades competentes se está valorando la posibilidad de si sería factible empezar a mover los restos, pero, es muy peligroso», asegura Marina López, responsable Técnico del cementerio.
Los reclamos de los familiares para salvar los restos de sus seres queridos en el cementerio ante la lava del volcán La Palma
«Hay familias que nos piden trasladar los restos de sus seres queridos, pero para eso se tienen que cumplir varias cosas. Primero que se autorice. Después contar con un sepulturero y un coche fúnebre ya que los restos se han de trasladar a otro cementerio», explica López muy afectada.
El otro día, le comentaba una vecina a la técnica del cementerio, que prefería perder su casa a los restos de su padre y no poder llevarle flores nunca más. «Está siendo todo muy duro. Pido un milagro, si la otra vez aguantó y se quedó rodeado por la lava, pero en pie, espero que esta vez pase lo mismo», concluye López.
Las párrocos preocupados por realizar los oficios al aire libre: no se puede en el cementerio por culpa de la lava del volcán La Palma
Alberto Hernández, el párroco de Todoque, el barrio del que no queda nada, ni siquiera su iglesia, está dándole vueltas al asunto. Con la colaboración de la Administración y de las concejalías implicadas, «estamos pensando cómo canalizar ese deseo lógico de todos los vecinos del municipio», dice Hernández.
Las parroquias organizarán ese día oficios en aquellos lugares que las autoridades designen como seguros, si es necesario al aire libre, porque todavía hay que ser precavidos con el coronavirus, y han puesto en manos del personal creativo del Ayuntamiento el diseño de un rincón de la memoria.
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