Un juez de Lugo insiste, por segunda vez, en que no hay delito por grabar a las más de 80 mujeres orinando en la fiesta de A Maruxaina en 2019.
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Un juez de Lugo no ve delito en grabar a mujeres en la vía pública ya que «no se aprecia el ánimo tendencial de quebrantar la resistencia física y moral» de las mujeres que fueron grabadas con cámara oculta en una romería.
Desestima por segunda vez la denuncia
El juez de Lugo ha vuelto a desestimar la denuncia al considerar que no existe delito en grabar a mujeres.
La asociación Mulleres en Igualdade de Burela (Bumei) ya ha recurrido la resolución ante la Audiencia Provincial de Lugo.
Una mujer en la calle o el espacio público sigue teniendo intacto su derecho a la intimidad. Hacer fotos a una mujer sin su consentimiento y difundirlas es violencia sexual. Los avances en los derechos de las mujeres tienen que aplicarse desde todos los poderes del Estado.
— Irene Montero (@IreneMontero) September 28, 2021
Grabaciones de cámara oculta
La investigación se remonta a la fiesta de A Maruxaina (Lugo), en 2019. Cientos de mujeres orinaron al aire libre y, sin permiso las grabaron. Esos vídeos terminaron circulando en páginas webs de pornografía. Entre las víctimas hay menores de edad.
Pasó un año hasta que descubrieron lo que había pasado, y denunciaron los hechos a las autoridades.
Caso archivado
En marzo de este año, el juzgado de Primeria Instancia e Instrucción número 1 de Viveiro quiso archivar el caso. El auto del juez sostenía que «debe tenerse en cuenta que se trata de una serie de grabaciones de mujeres orinando en una calle, es decir, en un lugar público en el que podrían ser vistas por cualquier persona que por allí transitase, y es por ello que no suponen ningún ataque ni vulneración de la intimidad en el sentido recogido en el artículo 197 del CP».
Delito contra la intimidad
El criterio del juez instructor difiere del que tiene Fiscalía, que considera que hay un delito contra la intimidad y estima que «alternativamente» puede existir también otro contra la integridad moral de las víctimas.
Pero el juez de Lugo rechaza que las grabaciones supongan un delito contra la integridad moral, en este caso porque «no se aprecia el ánimo tendencial de quebrantar la resistencia física y moral»
Vía judicial, no penal
Aunque el juez no vea delito en grabar a mujeres, e insiste en que los hechos denunciados no constituyen un delito contra la intimidad o el derecho a la propia imagen porque las imágenes se obtuvieron en la vía pública, argumenta que los hechos deberían ser tratados por la vía civil y no la penal.
