El kamikaze de la M-50 pisó el acelerador en el momento de la colisión y alcanzó los 146 kilómetros por hora, según los peritos en el juicio.
Temas cubiertos
La Fiscalía acusa al kamikaze de la M-50 de triplicar la tasa de alcohol permitida. Solicitan 15 años de cárcel por homicidio doloso, conducción temeraria con desprecio por la vida y contra la seguridad vial.
Juicio contra el kamikaze de la M-50
El conductor es acusado de haber matado a un joven de 20 años cuando conducía en dirección contraria por la M-50 de Madrid. Sucedió en 2019. Circulaba a 146 kilómetros por hora. Segundos antes de la colisión hubo un “suave frenado” y luego pisó el acelerador, según han explicado los peritos.
La Audiencia Provincial de Madrid ha continuado este jueves 23 de septiembre el juicio con jurado a Kevin C., acusado de acabar con la vida de Víctor López. La familia de la víctima, junto con la Fiscalía, piden 15 años de cárcel. La defensa solicita como máximo 4 años de prisión por un delito de homicidio imprudente. Tres guardias civiles han comparecido como peritos. Han determinado que el vehículo iba a una velocidad de 146 kilómetros por hora y que segundos antes de la colisión hubo un “suave frenado” seguido de un aumento del 22 por ciento de la velocidad. Han desvelado que pudieron ver algunos dispositivos en el vehículo del acusado «que hacían pensar que tenía modificaciones en la centralita del motor«. También pudieron ver algunos elementos externos como el tubo de escape o algunos conectores que “daban a entender que sí que había sido modificado”. Sin embargo, no pudieron comprobarlo por la falta de datos en la “caja negra” del «airbag».
Los argumentos del kamikaze de la M-50
Los médicos forenses han certificado que la muerte de Víctor López fue en el momento del choque debido a “las lesiones incompatibles con la vida”.
Uno de los trabajadores sociales del centro penitenciario donde Kevin C. cumple condena preventiva ha calificado su conducta como “correcta y participativa”. Por otro lado, ha adelantado que lo valorarán “positivamente”.
Por su parte, el acusado evidenciaba su cambio físico: ha perdido 15 kilos en estos dos años. Ha dicho esto de su psicólogo: “gracias a él, me he dado cuenta de que en esa época bebía mucho. Ahora me he dado cuenta de mi error ese día”. El acusado escribió una carta a la familia de la víctima. Necesitaba “explicar” lo sucedido. Lo ha comunicado llorando.
Los hechos según el Kamikaze de la M-50
Ese día había cenado con su primo y su hermano. Después fue a la casa que compartía con su novia Alicia, y posteriormente llegó hasta un karaoke en el que bebió mucho. Admite que cuando cogió el coche “iba mal” y en su cabeza hay un vacío total. En la sala le han acompañado sus padres. “No paraba de verme en la televisión, así que ya no sabía lo que recordaba y lo que había visto en los medios”.
LEA TAMBIÉN: