Los Mossos d' Esquadra han hallado un cadáver en una zona boscosa cercana al aeropuerto del Prat, en la que buscaban al parricida de Barcelona.
Los Mossos d’ Esquadra han encontrado el cadáver de un hombre en una zona boscosa cerca del aeropuerto del Prat que podría ser el de Martín Ezequiel Álvarez, el parricida que acabó con la vida de su hijo de solo dos años en un hotel de Barcelona hace ahora 20 días.
El hombre estaba en búsqueda desde entonces.
Investigan si el cadáver es del parricida
Los Mossos están investigando si el cadáver hallado pertenece a Martin Ezequiel, el parricida de Barcelona. No descartan que se trate del padre del pequeño, aunque todavía esta información no ha sido confirmada de forma oficial.
Fuentes de Mossos han explicado que han encontrado el cuerpo en una zona boscosa entre Barcelona y el Prat de Llobregat, donde está el aeropuerto. La policía catalana lo ha hallado ahorcado de un árbol.
Una de las líneas de investigación mantiene que el padre podría estar muerto, ya que no estaba realizando «movimientos de vida» en referencia a posibles pagos con tarjetas, identificaciones en hoteles, etc.
Parricida de Barcelona
Las autoridades buscaban a Martín Ezequiel Álvarez Giaccio por ser sospechoso de matar a Leo, su hijo de 2 años, en el hotel Concordia de Barcelona y dejar su cuerpo en el hotel. Los hechos sucedieron hacia las 22:30 horas del 24 de agosto, cuando los sanitarios encontraron a un niño de dos años inconsciente y con la cara morada.
Las cámaras del hotel del distrito de Sants-Montjuïc captaron el día del suceso cómo el padre huyó tras saltar la valla de la piscina del establecimiento. En el vídeo también se puede observar como poco antes de la huida, el padre del menor había abierto la puerta de la habitación que da al pasillo para supuestamente comprobar que no había nadie allí.
Para tratar de localizar al padre, los agentes lanzaron un complejo dispositivo de búsqueda que se ha alargado durante más de 20 días.
Los padres del pequeño se estaban separando y la voz de alarma saltó cuando la madre avisó de que estaba recibiendo mensajes diciéndole que «se arrepentiría». El último de estos textos que recibió la madre del pequeño fue: «Te dejo lo que te mereces».
