La madre del militar agredido en Huesca cuando salió a defender a una chica embarazada a la que un grupo acosaba, denuncia que los atacantes sigan libres.
Christian, el militar madrileño de 27 años agredido en una zona de bares de Huesca cuando salió en defensa de una chica que estaba siendo acosada por un grupo de chicos, continúa ingresado en el hospital de Zaragoza.
Yolanda, madre de Christian, ha acudido al programa Espejo Público para denunciar que los agresores siguen en libertad. «Están en la calle después de lo que le han hecho a una criatura por defender a una embarazada de seis meses y que tuvo que ser atendido en urgencias porque se moría», ha considerado su madre.
Según relata, la agresión pudo costarle la vida por la forma en la que se desplomó en el suelo.
La madre de la víctima pide que se condene a los culpables de la agresión. La novia del joven, embarazada, tuvo que ser atendida en urgencias.
Paula, novia del agredido y a punto de dar a luz al primer hijo de la pareja, reconoce que ha vivido días muy duros pero al ver que su novio se va recuperando ha sentido un alivio tremendo. «Están siendo los peores días de mi vida porque esto ha sido muy duro para todos«, reconoce.
Un joven le dio un puñetazo que le hizo caer y le provocó un grave traumatismo craneal a este joven natural de Valdemoro y destinado en el cuartel Sancho Ramírez de la capital altoaragonesa. Una persona que estaba junto a él les explicó que «los agresores habían sido unos seis o siete jóvenes de etnia gitana que se habían marchado a la carreras».
El joven agredido tuvo que ser operado de urgencia de una fractura craneal y hubo que drenarle sangre acumulada en el cráneo y en el tejido cerebral. Su evolución es favorable y desde ayer su vida no corre peligro.
El joven puede tener alguna secuela a nivel auditivo a largo plazo.
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