Una estudiante ha tomado unas vacaciones de más de 50.000 dólares y todo, gracias a una página web que ofrece vacaciones a quienes no pueden pagar.
Cassandra Jacqueline, una estudiante de 21 años, puede tomarse unas vacaciones de ensueño gracias a una página web.
Puede parecer una opción ambigua, que los niños ricos te paguen las vacaciones. Eso es lo que ocurre cuando te inscribes en el sitio web de Miss Travel.
Estudiante se da unas vacaciones de lujo por una página
Este sitio web ha sido concebido para dar la oportunidad a las estudiantes de viajar gratis, incluso sin poder permitírselo. El sitio en cuestión es sencillo e intuitivo, y permite publicar comentarios, como en una especie de social.
Es necesario registrarse. A continuación, puedes introducir varias opciones e ideas de viaje. Viaja conmigo, ven conmigo o enséñame tu país. El sitio está bien articulado; se pueden encontrar artículos, categorías, como Viajes para Principiantes, Destinos de la Semana, Parques Nacionales, encuestas, etc.
El invierno está en pleno apogeo, se lee en un post, y muchos de ustedes sueñan con el calor tropical. Para ayudarte a desestresarte, te contamos los destinos que están de moda este año. En la encuesta aparecieron países como Ecuador, Japón, Zimbabue, Groenlandia y Estados Unidos. El post concluye diciendo: ¿Cuáles son los destinos que le gustaría visitar este año?
En el último año, confiesa Cassandra, ha visitado lugares por los que, yendo sola, se habría gastado más de 50.000 dólares. Muchos podrían pensar que el intercambio no es del todo gratuito y que la joven tuvo que darse el gusto de viajar a cambio. Pero no es el caso. El sitio está hecho para crear una coincidencia y los viajes se organizan, sólo para la empresa.
Entonces, si de ese viaje también puede nacer algo, esto no está absolutamente excluido. En los últimos tiempos, han surgido muchos sitios con el propósito de compartir. Piensa en el sitio que ofrece un paseo en coche. Otra gran idea, viajar sin gastos, divirtiéndose y quizás en buena compañía.
Miss travel es uno de los ejemplos de cuando Internet puede empujar hacia el encuentro, a pesar de quienes piensan que es sólo una herramienta virtual y que suprime los contactos humanos.
